Después de doce partidos de Liga y tres de la Copa del Rey, tres de los fichajes que realizó el Tenerife el pasado verano con mayor relieve ofensivo, Samuele Longo, Filip Malbasic y Juan Villar, no han podido coincidir aún en un mismo encuentro. Lo cierto es que no siempre tuvo José Luis Martí la oportunidad de incluirlos en una alineación, ya fuera inicio o con el cronómetro en marcha. De hecho, este tridente blanquiazul formó parte de una convocatoria por primera vez el pasado domingo con motivo del Tenerife-Osasuna.

En esa primera oportunidad para atacar con Longo, Malbasic y Villar a la vez, el entrenador optó por alinear de inicio solo a los dos primeros. Luego, en la segunda parte, sustituyó al italiano por el onubense, mientras que el serbio permaneció en el campo hasta que el árbitro dio por cerrado el duelo.

Este desencuentro de Samuele, Filip y Juan tiene su explicación en la tardía llegada al equipo de los dos primeros y, sobre todo, en las lesiones del delantero cedido por el Inter y el extremo procedente del Real Valladolid. Para empezar, Villar sufrió una rotura muscular en la segunda jornada de Liga, la del triunfo en el Miniestadi, y no volvió a competir hasta octava fecha. Tras un mes y medio teniendo que conformarse con ser espectador, actuó como suplente en la victoria sobre el Nástic, del 7 de octubre, pero tampoco pudo disfrutar de la continuidad que venía persiguiendo, ya que regresó a la enfermería dos semanas más tarde por un golpe en el tobillo izquierdo. Al fin, el compromiso con el Osasuna marcó su segundo retorno. Por su parte, Longo dejó atrás una ausencia de cuatro partidos coincidiendo con la eliminatoria de Copa con el Espanyol. Una rotura muscular le impidió participar en los encuentros con el Nástic, Oviedo, Numancia y Lorca.

Entretanto, Malbasic pudo jugar siempre desde la tercera jornada, en la que debutó en una convocatoria, pero nunca participó con la oportunidad de conectar con Longo y Juan Villar. Hace dos días estuvo cerca, hasta que sus compañeros se cruzaron en la línea lateral del Heliodoro con rumbo al banquillo y al rectángulo de juego.

No es la primera vez que dos integrantes de este trío se relevan en un partido. En la segunda jornada, Longo entró por Villar en un partido para el que Malbasic no fue convocado. Más tarde, en la cita de Copa en Vallecas, fue el italiano quien entró por el serbio, con Villar en la Isla por una lesión. De vuelta a la Liga, Villar tuvo que pedir el cambio en el encuentro con el Numancia y su sustituto fue Malbasic, movimiento del que fue testigo Longo desde la grada. Y en la Copa, Martí quitó a Malbasic y puso a Longo para tratar de vencer al Espanyol estando Villar de baja.

De momento, los que más tiempo han compartido son Longo y Malbasic, con casi 390 minutos de un máximo de 1350 (si ambos hubieran estado disponibles siempre). En cuanto a Malbasic y Villar, la convivencia ha sido de 73 minutos, y la de Longo y Villar todavía no se ha producido.