La piscina municipal Acidalio Lorenzo, de la capital tinerfeña, reabrirá sus puertas este sábado con la celebración de una competición de natación, tras las obras de actualización y mejora realizadas durante los últimos siete meses.

El resultado de estos trabajos se traduce en su conversión en una instalación moderna y de primer nivel, comparable con las que hoy acogen competiciones internacionales, y la reapertura al conjunto de usuarios tendrá lugar el próximo lunes, según ha informado el Ayuntamiento capitalino en un comunicado remitido a Efe.

El anuncio de reapertura se celebró este jueves durante un acto en la propia instalación que contó con la presencia del alcalde de la ciudad, José Manuel Bermúdez, acompañado por el sexto teniente de alcalde y concejal de Infraestructuras, José Alberto Díaz Estébanez, y las concejalas de Deportes y del Distrito Salud-La Salle, Verónica Meseguer y Yolanda Moliné.

Bermúdez destacó que esta infraestructura, que cumplirá 53 años de historia en este año, necesitaba de una "remodelación urgente para corregir determinados problemas que presentaba en anteriores temporadas, y la inversión realizada nos ha permitido incluso mejorarla para llegar a más usuarios con un nuevo vaso y un mejor aspecto".

En este sentido, recordó que los trabajos de reforma comenzaron en mayo y se han prolongado durante casi ocho meses, con una inversión de 1.323.654,87 euros.

"Ha merecido la pena porque nos ha permitido recuperar un símbolo de la natación en Canarias", ha asegurado el alcalde, quien agradeció "la disposición y sacrificio de todos los clubes y usuarios, y la colaboración de las instituciones y entidades que nos han cedido sus instalaciones durante este tiempo".

José Alberto Díaz Estébanez ha recordado que la piscina municipal "es una instalación señera de Santa Cruz, y con esta inversión sufragada íntegramente con fondos del Ayuntamiento podemos decir que contamos con una de las mejores piscinas descubiertas de toda España".

Tras la actualización, el vaso de 50 metros ha visto ampliadas sus dimensiones, pasando a contar con 25 metros de ancho. Podrá ser dividido en diez calles de 2,5 metros cada una, pero también permitirá que la pileta se use de forma transversal, convirtiéndose en una piscina de 25 metros de ancho con 20 calles.

Verónica Meseguer, concejala de Deportes, consideró como principal mejora "la renovación de este vaso, que se traducirá en un importante ahorro de energía y también económico, que se completa con nuevas mantas térmicas que facilitarán el mantenimiento del calor del agua".

La reforma permitirá una notable mejora en la gestión y uso de la piscina, resolviendo el problema de la reposición de agua y el sobrecoste que conlleva su tratamiento.

Se facilita, además, el mantenimiento de la temperatura durante el invierno, con la instalación de una manta isotérmica en los tres vasos. Entre productos químicos, energía y agua, se producirá un ahorro de unos 100.000 euros anuales.

La obra incluye la mejora de la iluminación, nueva pavimentación y la instalación de una barandilla que impide el acceso de las personas que no sean usuarias, tanto en el vaso de 50 metros como en el de 25.

Además, se ha suprimido la plataforma adyacente de 1,20 de profundidad con que contaba la piscina de 50 metros hasta ahora. En su lugar se ha ejecutado un tercer vaso de 25 por 4,5 metros, con 1,2 de profundidad y dos calles. Esta nueva piscina será accesible mediante rampas, podrá ser utilizada de forma independiente y permitirá su uso a distinta temperatura.