El entrenamiento que realizó el Tenerife ayer por la mañana en El Mundialito, contó con la presencia de Marc Crosas, el último de los blanquiazules en unirse al trabajo tras las vacaciones de invierno por su compromiso con la selección de Cataluña, con la que jugó el pasado miércoles un partido amistoso ante Túnez, en Gerona. El centrocampista participó con normalidad en todos los ejercicios de una sesión que duró casi dos horas. También trabajo a pleno rendimiento Raúl Cámara, una vez recuperado de la gastroenteritis que le obligó a descansar el jueves. Los únicos que llevaron a cabo una rutina diferente, por estar lesionados, fueron Aitor Sanz, que tiene un traumatismo en un tobillo, y Darixon, condicionado por un problema muscular.