José Luis Martí supo ganarle la partida a Carlos Terrazas en el partido entre el Mirandés y el Tenerife de la temporada pasada. Los blanquiazules se impusieron en Anduva (1-2) con autoridad. El técnico mallorquín confía en repetir mañana una actuación similar. Para ello considera fundamental que su equipo logre aprovechar su velocidad para sorprender al contragolpe a un rival que juega con "un sistema bastante arriesgado" y que "deja espacios" en su campo.

Aarón Ñíguez no completó el entrenamiento, pero sí viaja a Miranda de Ebro. ¿Qué tal está?

Notó unas pequeñas molestia en el abductor. Veremos cómo se encuentra después del viaje. Además, aún queda un entrenamiento en la Península antes de jugar el partido. Y también tenemos que comprobar cómo se sienten los que jugaron el jueves ante el Mallorca. Prácticamente están todos muy bien, aunque es verdad que alguno acabó el partido con golpes. Por eso viajamos con veinte jugadores, para tener alternativas en el caso de que haya alguno que no puede actuar.

Cristo González vuelve a una convocatoria. ¿Ya está para jugar?

Hay que esperar al viaje, al último entrenamiento, a ver cómo están los jugadores que tienen golpes y las sensaciones de todos. Antes no vamos a decidir nada. El caso de Cristo es el mismo que el de Aarón.

Independientemente de eso, ¿tiene previsto hacer alguna variación en la alineación titular?

Primero quiero hablar con los jugadores y, sobre todo, ver qué sensaciones tienen. A veces, cuando ves a un grupo trabajar y manejarse bien, hay que seguir manteniendo la confianza. Pero tenemos la tranquilidad de saber que si uno no puede participar por lo que sea, sale otro y lo hace francamente bien, porque es lo vemos cada día en los entrenamientos.

¿Hay algún caso que le preocupe más que el resto?

No. No ha habido tiempo para asimilar el esfuerzo realizado el jueves. Con el paso de las horas empezarán a salir las molestias y las sobrecargas. En el último entrenamiento veremos quién está más cansado y decidiremos.

Hablando de asimilar cosas, ¿cómo se tomó el equipo el resultado del partido con el Mallorca?

Ellos saben que, normalmente, jugando a ese mismo nivel, tendrán más opciones de ganar los partidos. Por tanto, tienen que mantener la confianza. Creen en lo que están haciendo, porque piensan que es lo correcto para lograr victorias. Nos falta, evidentemente, finalizar un poquito más las jugadas. Pero la dinámica con la que están actuando es la correcta.

¿Ese es el mensaje que le ha transmitido a la plantilla?

Sí, que no bajen los brazos, que sigan igual, que intenten dar todavía un poquito más, sobre todo en los metros finales, y que manifiesten esa agresividad ofensiva de la que hemos estado hablando.

Pasadas las horas, ¿el análisis del partido con el Mallorca sigue siendo el mismo?

Lo estuve viendo otra vez y me queda la misma sensación, la de haber sido superior y haber podido ganar, que es lo que queríamos y te permite impulsarte en la clasificación. Pero el fútbol tiene estas cosas; no siempre te tocan las cosas de la misma manera y hay que asimilarlo. Sobre todo, no hay que bajar los brazos y estar convencidos de lo que hacemos.

Por ese lado no tendrá dudas.

Tenemos que sentirnos fortalecidos por ser protagonistas, por tener el control de los partidos y por ver que manejamos todos los registros y somos capaces de interpretar cuándo hay que jugar al contragolpe o no. Todo eso hace que seamos un equipo muy competitivo y difícil de batir; un equipo que es capaz de ganar cualquier encuentro que dispute.

¿Qué destacaría del Mirandés?

Es uno de los tres de la categoría que aún no han perdido. No será nada fácil. Más confianza que ellos no va a tener nadie, independientemente de la que tenemos nosotros. Será un equipo valiente, tal como ha demostrado en los últimos años, con un sistema bastante arriesgado y con espacios que habrá que intentar aprovechar.

¿Tiene previsto modificar la alineación por esa particularidad que presenta este partido?

No. Más que nada, influirán las sensaciones que tengamos al ver al grupo en el último entrenamiento. Es cierto que te planteas muchas posibilidades, como jugar con dos atacantes por el hecho de pisar más el área y tener más presencia en ataque. Pero luego pasa que vas a Almería y creas seis o siente ocasiones en la primera parte con tres centrocampistas. Al final, depende más la evolución del sistema que el propio sistema en sí.

¿La idea es iniciar el partido como en Almería, teniendo la iniciativa desde el primer momento?

Claro, pero el rival también querrá lo mismo. Por tanto, en esa pelea tendremos que ser capaces de salir ganadores. Al final, si ganas las segundas jugadas, esas disputas y los duelos personales de cada uno, tendrás más continuidad en el juego; y siendo así, estarás más tiempo en el campo rival y tendrás más posibilidades de hacer goles.

La temporada pasada ganaron con autoridad en la visita a Anduva. ¿Tienen tan claro cómo hacerle daño al Mirandés?

Queremos interpretar eso, que cuando tengamos espacios, sepamos manejarnos con la velocidad que tenemos. Pero el rival también juega y sabrá cuáles son nuestras virtudes y los problemas que podamos tener. Al final, se trata de una pelea en el centro del campo, porque ellos acumulan a muchos jugadores en esa zona del campo. Si somos capaces de tener la posesión del balón y buscar cambios de orientación para darle velocidad al juego, tendremos opciones de llegar a la portería rival.

¿Puede ser uno de los rivales con las señas de identidad más marcadas de la competición?

Claro, porque mantienen al mismo entrenador y siguen con el mismo sistema de juego. Los futbolistas que llegan allí, lo hacen para competir en un club que no tiene tanta presión. Pero los jugadores se crean su propia presión, porque lo que quieren es mejorar y mirar hacia arriba en la tabla.

Hay varios exjugadores del Tenerife en el Mirandés. Algunos, como Aurtenetxe o Pedro Martín, fueron blanquiazules la temporada pasada y ahora están ofreciendo su mejor versión. ¿Cree que es por no tener la misma presión?

Al final se trata de darlo todo. En ese sentido, creo que los jugadores tienen que darlo todo estén donde estén, y deben intentar adaptarse lo antes posible al equipo en el que están. Cuanto mejor lo hagan, mejor para ellos, porque rinden más, y mejor para el club.

Una convocatoria de 20

El Tenerife viajó ayer hacia Miranda de Ebro con veinte jugadores. La convocatoria presenta las novedades de Cristo González, que se perdió los dos últimos partidos por un golpe en la espalda, y Jorge, descartado en los mismos encuentros que el delantero pero por decisión técnica. Forman la lista los porteros Dani Hernández e Ismael Falcón; los defensas Raúl Cámara, Carlos Ruiz, Germán, Samuel Camille, Alberto, Iñaki y Jorge; los centrocampistas Vitolo, Aitor Sanz y Marc Crosas; y los atacantes Suso, Amath Ndiaye, Omar Perdomo, Aarón Ñíguez, Álex García, Cristo González, Antony Lozano y Aythem Jouini. Martí tendrá que prescindir de dos jugadores para dejar la convocatoria en dieciocho componentes. Los únicos que no se desplazaron ayer a la Península fueron Edu Oriol, que se recupera de un esguince de rodilla, y Jairo Izquierdo, futbolista con el que no cuenta Martí. Los blanquiazules se ejercitarán a las 9:00 horas de hoy en las instalaciones del CD La Charca, equipo de Miranda de Ebro.

Vuelve Maikel Mesa

No jugó el jueves en Montilivi por un problema estomacal, pero el tinerfeño está recuperado y parte como titular en el partido de mañana. Por contra, Pedro Martín es duda. El malagueño acabó el encuentro con el Girona con unas molestias. Además, Fofo no se repondrá a tiempo de una lesión.