El tenista español David Ferrer dijo hoy, tras debutar con victoria en el Abierto de Estados Unidos, que está "físicamente tocado" y que ahora ve "difícil" estar listo para la Copa Davis, aunque aseguró que todavía no ha tomado una decisión.

"A día de hoy es difícil que pueda estar listo", reconoció Ferrer, el cuarto cabeza de serie en el último torneo de Grand Slam de la temporada, después de ganar por 6-1, 6-2, 2-6 y 6-2 al bosnio Damir Dzumhur.

El alicantino, de 32 años, afirmó que después de Flushing Meadows todavía tiene por delante una gira asiática "muy importante" y sabe que físicamente se tiene que cuidar, pero reiteró que todavía no ha tomado una decisión sobre la Copa Davis.

"Si fuera por Charlie (Moyá) lo haría, porque es un capitán al que tengo mucho aprecio", añadió Ferrer, quien disputa su duodécimo Abierto como profesional y que tendrá de rival al ganador del duelo entre el australiano Bernard Tomic y el alemán Dustin Brown.

En cuanto al partido de este martes, el tenista afirmó que empezó jugando "muy bien" los dos primeros sets hasta que llegó la tercera manga, cuando físicamente estaba "cansado" y jugaba con mucho calor en la pista.

"Lo importante es que me pude recuperar y lograr el cuarto set con facilidad", añadió Ferrer.