El ciclista español Alberto Contador, tras el diagnóstico de su fractura de tibia que le obligó a abandonar el Tour, dudó de su participación en la Vuelta ciclista a España, que comenzará el 23 de agosto en Jerez de la Frontera.

Alberto Contador declaró en la clínica Cemtro que "es muy complicado llegar a la Vuelta". "Si voy, quiero disputarla y quizás sólo tenga dos semanas de entrenamiento por lo que lo veo difícil", añadió el madrileño.

A pesar del escaso tiempo de recuperación que Contador tendría si participa en la última gran carrera por etapas de la temporada, el doble campeón del Tour mandó un mensaje de ánimo a sus seguidores: "Haré todo lo posible para estar en la Vuelta".

La caída y el abandono en el Tour no han mermado psicológicamente al ciclista de Pinto, a pesar de que la ronda gala era su deseo para esta temporada. "Mi objetivo este año era el Tour, lo he preparado como nunca en toda mi carrera deportiva y estaba muy ilusionado", dijo el corredor de Tinkoff-Saxo.

En cuanto al estado de forma anterior al abandono, Alberto Contador declaró sentirse "en un momento muy bueno". Apeló a la grandeza del ciclismo para describir su situación. "De un segundo a otro, todo el trabajo se ha terminado. Son cosas que no puedes controlar", añadió.

Alberto Contador se mostró con ganas de acabar la temporada subido en la bicicleta, si es que finalmente no corre la 69 edición de la Vuelta. "No me gustaría acabar la temporada de esta manera hasta la siguiente", declaró el español.

Respecto al próximo Mundial que se disputará en España, en la localidad de Ponferrada, y los siguientes meses, Contador no cerró las puertas a su participación. "El Mundial no se adapta a mis características de corredor pero si que hay otras carreras a final de temporada que quizás podría usarlas más que para competir, para no perder el tono de cara al año que viene", finalizó.