El cuádruple campeón del mundo de F1, el alemán Sebastian Vettel (Red Bull) -ganador de los últimos cuatro títulos-, ha dicho hoy en Barcelona que no se siente lo feliz que quisiera, pero que en Red Bull tienen que ser pacientes ante la situación que viven, muy por detrás de los Mercedes.

Este fin de semana se disputa la quinta prueba del mundial de F1, el Gran Premio de España, en el que el alemán montará un nuevo chasis, determinación que ha adoptado el equipo austríaco después de los problemas detectados por el excesivo desgaste de los neumáticos. Ya que una fisura pueda estar ocasionando un problema, Red Bull ha decidido echar mano de un antiguo chasis.

"No es inusual cambiar el chasis y si lo haces es para uno nuevo, pero nosotros hemos tirado para atrás y montamos uno del año pasado. Es cuestión de hacer un ''reset'' y empezar de nuevo", ha señalado Vettel ante los informadores.

El piloto alemán, que está viviendo un momento alejado del podio, ha asegurado que no se siente cómodo en estas posiciones. "Creo, y Fernando Alonso probablemente dirá lo mismo, que estamos aquí para ganar. No estoy aquí para acabar segundo o quinto. Pero hay que ser realista, porque el objetivo al final es conseguir lo máximo que te proporcione el coche, y yo creo que puedes acabar satisfecho si llegas a este objetivo", ha razonado.

"Si a lo máximo que puedo aspirar por ahora es al podio o al quinto puesto, si lo acabo alcanzando, estaré satisfecho", ha señalado el piloto.

"En estos momentos el que gana es Mercedes, y es difícil batirles, aunque no imposible", ha añadido el piloto alemán, quien no ha querido lamentar el inicio del mundial "porque hay que mirar a la siguiente carrera, en mejorar y obtener los máximos puntos".