El delantero holandés Arjen Robben anunció que él y sus compañeros del Bayern convertirán mañana el Allianz Arena de Múnich en "un infierno" en el partido de vuelta de la semifinal de la Liga de Campeones en el que tienen que derrotar al Real Madrid por dos goles de diferencia.

"Jugamos en nuestro estadio, Queremos cumplir con la exigencia de Karlheinz Rummenigge y vamos a convertir el estadio en un infierno", dijo Robben en declaraciones que publica hoy el diario alemán "Bild".

"Hay algo que puedo prometer desde ya. Lucharemos con tanta voluntad y con tanto corazón que nadie podrá decir que no lo dimos todo. Creo que vamos a ir a la final de Lisboa", agregó el jugador.