Fernando Verdasco, 54 del mundo, mantuvo contra las cuerdas al británico Andy Murray, héroe local en Wimbledon y segundo favorito, que al final acabó remontando dos sets en contra para firmar su pase a las semifinales, al derrotar al español por 4-6, 3-6, 6-1, 6-4 y 7-5, en tres horas y 27 minutos.

Murray disputará ante el polaco Jerzy Janowicz, número 22 del mundo, su quinta semifinal consecutiva en el All England Club.

De haber ganado Verdasco hubiera sido la segunda semifinal de un Grand Slam para el español después de la del Abierto de Australia del 2009 ante su compatriota Rafael Nadal.

El tenista madrileño se quedó a un solo paso de convertirse en el cuarto semifinalista español en la historia de Wimbledon, tras Andrés Gimeno (1970), Manuel Orantes (1972) y Rafael Nadal (de 2006 a 2011, excepto 2009).

A sus 29 años, Verdasco afrontaba su reto más difícil hasta ahora esta temporada: encarar en la pista central a Murray, adorado por su público y primer aspirante serio a dejar en casa un torneo que no gana un británico desde 1936 (Fred Perry).

La tarea parecía imposible de entrada, pero comenzó a hacerse tangible cuando el español rompió el servicio del escocés a finales de un primer parcial que se había mantenido equilibrado hasta entonces.

Murray, que ha sufrido problemas de espalda en los últimos tiempos y se saltó Roland Garros para recuperarse de cara a Wimbledon, mantuvo la calma y amagó con romper el servicio del español al iniciar el segundo parcial.

Verdasco, firme con su zurda, mantenía sin embargo la presión sobre el escocés, jaleado por las gradas de la pista central, donde el pasado verano ya probó el éxito al colgarse al cuello la medalla de oro olímpica.

El español, con la moral al máximo desde que se puso a las órdenes del entrenador Ricardo Sánchez este año, no se acobardó ante una estadística abrumadora en su contra: solo había ganado hasta ahora uno de los nueve encuentros en los que se había enfrentado a Murray, los octavos de final de Australia en 2009, cuando el escocés cayó abatido al quinto set.

Desde hace cuatro años, cuando Verdasco vivió la cumbre de su carrera, el español ha ido cayendo puestos en el ránking (llegó a ser séptimo en 2010), y en los últimos tiempos su clasificación ha quedado lastrada por los problemas físicos.

Tres años después de ganar su último título -se impuso en Barcelona y San José en 2010-, el español ha reencontrado en Londres la mejor versión de sí mismo.

Para desesperación del extécnico del Manchester United Álex Ferguson y el resto de público de la central de Wimbledon, Verdasco puso hoy contra las cuerdas al número dos del mundo con su mejor tenis.

El español, con la fortuna de cara en la primera mitad del duelo, dio un hachazo al partido al término del segundo parcial, cuando una bola siguió una trayectoria extraña al rozar la red y dejó a Murray 3-5 por debajo en un set que ya era irrecuperable para él.

En el tercer parcial, Verdasco se deshinchó, acusó su falta de acierto al servicio y dejó pasar la oportunidad de rematar a su rival, que acabó anotándose el set con un contundente 6-1.

Verdasco le esperaba con fuerzas renovadas en un cuarto set, el más largo del partido (49 minutos), que el escocés acabó decantando de su lado gracias a su inspiración al servicio.

Con menos luz, ya bien entrada la tarde al suroeste de Londres, Verdasco desaprovechó sus opciones de ponerse por delante en el set definitivo (estuvo cerca de ponerse 5-3 por delante), y acabó sucumbiendo ante un Murray que superó esta vez el miedo escénico que le provoca la central de Wimbledon.