Un recorrido por el Madrid Arena y otro por la Caja Mágica pusieron fin a las visitas de la Comisión de Evaluación del COI a las sedes de Madrid 2020, en las que escuchó protestas de empleados municipales y de trabajadores del Club de Campo, escenario elegido por la candidatura para tres deportes.

La tercera jornada de estancia de los evaluadores del COI en la capital permitió a la candidatura rendir cuentas y presumir de su oferta hotelera y de transporte, y exponer su plan de operaciones con los medios de comunicación, que contempla la llegada de 19.000 periodistas a Madrid en el año 2020.

Tras las exposiciones, la comitiva emprendió el periplo diario por las sedes del proyecto, hoy con antelación ya que el programa de la jornada concluirá con una cena en el Palacio Real, a las 20.00 horas, ofrecida por la Reina y los Príncipes de Asturias.

A diferencia de los días anteriores, los delegados del COI pudieron escuchar con más fuerza las protestas de la calle. A las puertas de su hotel cerca un centenar de empleados públicos del Ayuntamiento pidieron que los Juegos no se celebren en España sino en Tokio, otra de las candidatas junto a Estambul.

Trabajadores de polideportivos municipales, la mayoría, y algunos otros del Samur (servicio de asistencia municipal de urgencia y rescate), se apostaron en las cercanías del hotel con pancartas que mostraban lemas en contra de la concesión a Madrid de los Juegos.

También a las puertas del Club de Campo, sede de tiro con arco, pentatlón moderno y golf, unos 200 trabajadores de la instalación se manifestaron en señal de protesta por el bloqueo en la negociación de su convenio y recibieron a la comisión con una sonora pitada.

Después, el Madrid Arena, la Caja Mágica y el canal de remo y piragüismo de Getafe, -sólo para un grupo de técnicos-, pusieron fin al recorrido por las instalaciones.

En ellas presidentes de federaciones como Javier Revuelta (Hípica), Gonzaga Escauriaza (Golf), Juan de Dios Romásn (Balonmano), José Luis Escañuela (Tenis), José Luis López Cerrón (Ciclismo), Fernando Climent (Remo), Aljandro Soler (Pentatlón moderno) o Juan José Román (Piragüismo) oficiaron como anfitriones, junto a deportistas como Manolo Santana (tenis), Luis Álvarez Cervera (hípica) o Mihaela Ciobanu (balonmano).

Durante la visita al Madrid Arena, sede del balonmano, los examinadores recorrieron la parte superior del pabellón, cerrado temporalmente tras la tragedia de la noche de Halloween, en la que cinco jóvenes perdieron la vida tras una avalancha durante una fiesta.

El contenido teórico de la jornada se centró en alojamientos y transporte, aspectos en los que Madrid presume de cumplir las exigencias del COI.

El consejero delegado de la Oficina de Turismo de Madrid, Ignacio Fernández, precisó que el número de habitaciones garantizadas roza las 45.000 y habló de "una planta hotelera de calidad".

De ellas, 35.843 están en un radio de 10 kms. respecto al Parque de El Retiro, y el resto a una distancia de entre 10 y 50 kms.

En la ponencia dedicada al Transporte intervinieron el director de Calidad del Consorcio General de Transportes de Madrid, Carlos Cristóbal, y la gerente de Proyectos y Sedes de la empresa encargada de la estrategia de movilidad de los juegos, Saioa Sancho.

Según su exposición, el tiempo medio de los desplazamientos del 65 % de los atletas que se alojen en la Villa Olímpica será de cinco minutos. El 98 % será inferior a 15 minutos y nadie empleará más de 25 minutos en ningún recorrido.

Ambos coincidieron en que las infraestructuras existentes, mejoradas durante los últimos años, responderán a las necesidades de los Juegos sin realizar grandes proyectos de construcción.

Madrid expuso también su modelo de Villa de Medios, tecnológica y sostenible, situada en la zona Campo de las Naciones, que permitiría el acceso a pie a varias de las sedes principales.

La construcción, con módulos prefabricados, constituiría "un barrio con sabor mediterráneo", en palabras de la arquitecta responsable de su diseño, Lorena Segura.