Este año se adentró en el gigantesco universo de Jurassic Park ("La saga jurásica"), ubicó en El Hierro su primera novela ("Una isla a la deriva") y casi volvió a sus orígenes con una cuarta publicación enlazada con la magia Disney ("El sonido Disney. En busca de la canción perfecta"). "A nadie le gusta que encasillen su trabajo, pero soy consciente de las ataduras creativas que he propiciado alrededor de Woody Allen y Disney. En cualquier caso, yo me siento orgulloso de que me asocien con esos grandes referentes", asegura Jorge Fonte (1967). Hace 18 años se estrenó con "Walt Disney. El universo animado de los largometrajes (1937-1967)". Un año después amplió esa franja con filmes del mismo perfil datadas entre 1970 y 2001. "Todo empezó con un ratón" (2004) era la última referencia de este género antes de que emergiera "El sonido Disney. En busca de la canción perfecta". "Siempre he querido ir un poco más allá de lo que se queda en la superficie de espacio Disney", explica el escritor y ensayista santacrucero. "Esa curiosidad por descubrir qué es lo que hay más allá de Walt Disney se refleja en este libro y en los tres anteriores", encadena un creador que lanza una primera idea. "Él no dibujó y tampoco compuso, pero sí que tenía una intuición musical especial", sostiene en referencia al animador, director, guionista y productor natural de Illinois (1901-1966). "Si no hubiese sido cineasta posiblemente habría tenido un porvenir ligado a la industria musical", cuenta antes de adentrarse en un clásico con mayúsculas "Fantasía".

"Esa es una película que tiene una gran relevancia en las bandas sonoras Disney. Fantasía es una magnífica aproximación al lenguaje clásico. Muchas personas se aficionaron a este género viendo y escuchando un filme que transmite el valor que ha tenido la música en las producciones Disney". Ese es el hilo conductor de una publicación que seduce a los lectores con anécdotas y datos que se han ido almacenando en la memoria de Fonte durante más de tres décadas. "Para dar forma a una obra de estas características hay que consultar mucha bibliografía y ver un montón de películas. Por fortuna, Disney es una industria que conozco bien y eso me permitió acortar los plazos. Acometer un libro de este perfil sin conocer todas sus interioridades es una misión imposible. No digo que no se pueda hacer, pero en el resultado final se apreciarían esas grietas. Lo que he tratado de hacer en El sonido Disney es trasladar a los lectores distintas lecturas sobre un asunto único. Conozco todas las canciones que se han inventariado en este proyecto, pero el reto era transmitir quién las compuso, qué intérpretes las cantaron y cómo evolucionaron en algunos casos hasta originar nuevas versiones", enumera Jorge Fonte en un momento de la entrevista en el que vincula nombres legendarios de la música con las propuestas Disney. "Las discográficas siempre tuvieron claro que un álbum Disney era tan valioso como uno de villancicos. En ese sentido, recurrieron a leyendas como Barbra Streisand, Elton John, Louis Armstrong, Rod Steward y otros para enriquecer sus partituras".

A pesar de los piropos que Jorge Fonte le dedicó a la música de "Fantasía", él tiene su canción perfecta de Disney. "Sé que los más puristas me van a machacar, peroEl círculo de la vida tiene todos los ingredientes para ser considerada la mejor canción en la historia de Disney. Reunió a cuatro grandes -Elton John, Hans Zimmer, Mark Mancina y Tim Rice- en torno a una experiencia que refleja lo que ha querido transmitir siempre Disney a través de sus bandas sonoras", añadiendo que "en las casi trescientas referencias que hay en El Sonido Disney hay un buen número de temas que merecen un trato especial porque están dotados de una calidad extraordinaria". En ese saco, el tinerfeño coloca composiciones que formaron parte de los créditos de títulos como "Mary Poppins", "La Sirenita", "La Bella y la Bestia", "Pocahontas", "Aladdin" o "Frozen", la última propuesta Disney que se alzó con un Oscar en el apartado de Mejor Canción Original ("Let it Go" / 2014).

Allan Hancock y Howard Ashman son dos piezas claves a la hora de explicar el tránsito de muchas películas Disney a la cartelera de los musicales de Broadway. "Ellos son los encargado de revivir los estudios en los años 90 a través de la música... De hecho, un prestigioso crítico neoyorquino llegó a escribir que hoy en día para ver un buen musical hay que ir al cine", rescata en clara referencia a lo que estaba ocurriendo con "Aladdin", "El Rey León", "La Bella y la Bestia" o "Mary Poppins".

Sobre la portada de "El sonido Disney. En busca de la canción de perfecta", una ilustración obra de Paco Sáez, Fonte revela que su primera intención era recurrir a una ilustración de Donald en la que cantaba como Frank Sinatra tras caerle una maceta en su cabeza. "Pedí permiso para usar esa imagen pero, a pesar de los contactos que tengo por haber colaborado en otras ocasiones con Disney, este no llegó. Al final recurrimos a un micrófono y unos guantes blancos que todo el mundo es capaz de asociar con Mickey", concluye el tinerfeño.