Era cuestión de tiempo. De una parte, el que se ha tardado en comprender la complicada pronunciación del acrónimo MNH que se escogió para "bautizar" al Museo de la Naturaleza y el Hombre, sobre todo para los extranjeros, y también por el hecho de que ni siquiera los naturales terminaban de reconocerlo, era complejo de retener, de manera que se referían a este espacio como el Museo Natural; ese que está junto al TEA o en un lugar próximo a la iglesia de La Concepción.

A propósito, el presidente del Cabildo, Carlos Alonso, resaltó en su intervención lo "acertado" de esta nueva denominación, "que es fácil de recordar", dijo, mientras la consejera insular de Museos, Amaya Conde, incidió en que las siglas MUNA de Museo de Naturaleza y Arqueología, "son las mismas en cualquier idioma" y su articulación es sonora y breve.

De otra parte, como admitía ayer el presidente insular, se hacía necesario llevar a cabo este cambio, "pues se trata de un espacio vivo" que ahora, con la nueva denominación, "sí refleja, expresamente, el contenido del proyecto expositivo que alberga". Y es que, resaltó, "había que volver a las raíces y a los orígenes", fusionando los nombres históricos de los dos primeros museos insulares: el de Ciencias Naturales y el Arqueológico.

Pero además y, sobre todo, era cuestión de tiempo porque con las nuevas sensibilidades "se ha generado polémica y una parte de la sociedad no se sentía representada con ese nombre", señaló la consejera insular de Museos, un argumento que refrendó Carlos Alonso al destacar que este espacio, ahora renombrado, "cumple con la premisa de ser inclusivo con la sociedad".

Y el tiempo, inexorable juez, también ha estado presente en un proceso que ha durado unos tres años y medio, porque "si nombrar es complicado, renombrar lo es aún más", subrayó el presidente.

Amaya Conde recordó que el procedimiento se inició hace unos tres años y medio, cuando el 20 de febrero de 2015 se creó una comisión técnica, se contrató a una empresa de "naming" y de "las 14 propuestas recibidas se preseleccionaron 3", a las que se aplicó un test de marca para comprobar la idoneidad del nombre y la comprensión del nuevo concepto.

El resultado suena así: NUMA.

Amaya Conde

consejera insular de museos

Carlos Alonso

presidente del cabildo de tenerife

Una voz "universal"

Las acepciones de MUNA:

Este acrónimo ya lo luce el Museo Nacional de Antropología de El Salvador (MuNa).

Es nombre propio femenino y proviene del árabe "munyah". Muna, princesa consorte de Jordania, fue la segunda esposa del rey Hussein I y madre de Abdubllah II, actual soberano.

En Marruecos, suministro de víveres que las ciudades, los aduares y las tribus tienen obligación de dar a los enviados del sultán o de un gobernador.

Se llama así a una pequeña ciudad en el estado de Yucatán, México, ubicada a 64 kilómetros al sur de la capital, Mérida.

En su acepción de deseo da nombre a un restaurante en Ponferrada (León).

Y una banda de rock, un trío con sede en Los Ángeles.