De repente te despiertas y ves que es de día; no tienes claro qué hora puede ser; piensas un rato y deduces que deben de ser sobre las once de la mañana. Es sábado y el día anterior rodamos de noche, de seis de la tarde a seis de la madrugada, lo que en la jerga cinematográfica se llama "split": parte de día y parte de noche.

Cuando empiezas un rodaje, sabes que una vez que comience la producción tu tiempo de pensar en el medio y largo plazo se acaba. Tienes una orden de trabajo, unas secuencias que grabar cada día y un número de páginas que hacer por jornada; el rodaje varía, empiezas a las seis de la mañana un día, el siguiente a las doce y jueves y viernes a las seis de la tarde para aprovechar las cortas noches de verano. Cada historia es diferente; hay películas o series que suceden de noche y se ruedan en verano, cuando las noches son cortas, lo que supone un problema; otras se ruedan solo en interiores, así que puedes controlar la luz; otras en interiores y exteriores, de noche y de día, y cada jornada de rodaje es diferente. Este era el caso de la serie que empecé a rodar el lunes pasado.

Rodamos cinco días a la semana y los dos días restantes hay que organizar el trabajo de la siguiente, aprovechar esas pocas horas libres y levantar la vista, ver qué cosas quedan por resolver en las siguientes semanas, localizaciones por definir, personajes a los que asignar un actor para que cobren vida, decisiones de montaje, de guion, de producción, ver las propuestas de vestuario y, cuando te queda un rato, hay que descansar, aunque sea poco, pero hay que hacerlo.

Cuando empiezas el rodaje hay unos hitos que es necesario ir pasando. El primer día es una jornada de nervios y sonrisas; hay mucha ilusión y mucha incertidumbre, los actores van llegando y repitiendo los rituales que se han ido haciendo en las pruebas de maquillaje y vestuario, la "script" marca qué secuencia, qué maquillaje, pelo y vestuario corresponde a tal o cual actor o actriz. Tú ya has visto y aprobado esos maquillajes y vestuarios, pero esta es la primera vez que los vas a ver en la localización, con la luz preparada y a través de la cámara y la primera vez que la historia será real. Acabar el primer día es mágico y algo parecido ocurre al acabar la primera semana. El equipo en esa primera semana se conoce, cada uno aprende cómo trabajan sus compañeros; el equipo de cámara se coordina con el equipo de maquinistas y el de dirección y el "travelling", los focos, trípodes y demás elementos se mueven con rapidez por los sets de rodaje; el equipo de arte organiza y decora set tras set y maquillaje y vestuario retocan y preparan a los actores en tiempo récord. El parte de la "script" dice que la primera semana se han hecho ciento sesenta y cinco posiciones de cámara, esto es, treinta y tres por día o, lo que es lo mismo, tres a la hora. En cada movimiento de cámara se retoca iluminación, maquillaje, decoración, atrezo y la única manera de conseguir ser rápidos y efectivos es trabajar como un perfecto equipo: más de setenta personas coordinadas como los mecánicos de la Fórmula 1 cambiando una rueda.

Así que, cuando te levantas ese sábado con la cabeza aún embotada después de haber dormido unas pocas horas, piensas en todo lo que queda por hacer, pero piensas que la primera semana de rodaje se ha terminado; ha habido días en los que no has acabado todas las páginas, y eso es malo; pero otros has recuperado y has rodado más rápido, y eso está bien. Además, ha llovido todos los días y eso no ha ayudado mucho, pero se ha ido cambiando el orden de rodaje para burlar a las juguetonas lluvias que han hecho de esta primera semana de rodaje de julio una de las más lluviosas que se recuerdan; el equipo ha continuado impertérrito a lo suyo, a rodar, a hacer páginas de guion, a hacer planos y contraplanos, picados y contrapicados, usar teleobjetivos y grandes angulares, planos detalles y planos secuencias; el equipo a lo suyo, a rodar, truene, llueva o haga sol, a rodar o, lo que es lo mismo, a hacer que los sueños se hagan realidad y, mientras te desperezas esa mañana de sábado, piensas que hacer que los sueños se hagan realidad es una de las mejores cosas a las que te puedes dedicar.