Con Penélope Cruz, Javier Bardem y Ricardo Darín como protagonistas, la película "Todos lo saben" inaugurará el martes en español el Festival de Cannes y ejercerá de punta de lanza de una 71 edición de heterogénea presencia latina, que da cabida a cineastas debutantes y consagrados.

La cinta del iraní Asghar Farhadi, rodada completamente en España, releva en ese honor al concedido en 2004 a Pedro Almodóvar con "La mala educación", la última vez que un filme inaugural en la Croisette no habló en inglés ni en francés.

"Todos lo saben" es el único aspirante en español a la Palma de Oro en un año en que el resto de proyectos en ese idioma ha encontrado su espacio en secciones paralelas como Una Cierta Mirada, la segunda en importancia del certamen, dentro también de su selección oficial.

Allí, el argentino Alejandro Fadel proyectará "Muere, monstruo, muere", una cinta de horror, y su compatriota Luis Ortega defenderá "El ángel", su particular retrato de la vida del asesino en serie Carlos Robledo Puch.

Junto a ellos, la brasileña Renée Nader Messora y el portugués João Salaviza mostrarán "Chuva e cantoria na aldeia dos mortos", con la que el realizador regresa a un certamen que en 2009 le otorgó la Palma de Oro al mejor cortometraje por "Arena".

Pero es en la Quincena de Realizadores, independiente y no competitiva, donde Latinoamérica y España mostrarán la fortaleza de su industria, con siete largometrajes y dos cortos, de los 30 expuestos en total.

El colombiano Ciro Guerra, el primero en su país en estar nominado a los Óscar a mejor cinta de habla no inglesa por "El abrazo de la serpiente", inaugurará ese apartado con la película de acción "Pájaros de verano", codirigida junto a su mujer, Cristina Gallego.

El español Jaime Rosales, un veterano de Cannes, se lanzará a la conquista del público con "Petra", una tragedia de inspiración griega en sus propias palabras, y el francoargentino Gaspar Noé garantizará la cuota de polémica con "Climax", tres años después de haber escandalizado al respetable con "Love".

La Quincena ha apostado también en su 50 edición por "Los silencios", de la brasileña Beatriz Seigner, y "Cómprame un revólver", del guatemalteco y mexicano Julio Hernández Cordón, que según los organizadores constituye "una mezcla formidable entre Peter Pan y Mad Max".

El argentino Agustín Toscano vuelve a Cannes con "El motoarrebatador", tras haber obtenido en 2013 la mención especial del jurado de la Semana de Crítica con "Los Dueños", y la española Arantxa Echevarría se estrenará con su ópera prima, el filme de amor entre dos adolescentes gitanas "Carmen y Lola".

Entre los cortos, la colombiana Juanita Onzaga exhibirá el documental "Our song to war", rodado en Bojayá, poblado del noroeste de Colombia escenario de la masacre de 79 personas en 2002 por parte las FARC, y el francés Nicolas Boone acudirá con "Las cruces", filmado en Bogotá.

En la Semana de la Crítica, también paralela y nacida hace 57 años para descubrir a jóvenes realizadores y dar una oportunidad a cinematografías diferentes de la competición oficial, ha pasado la criba la coproducción de Portugal, Francia y Brasil "Diamantino", sobre un astro imaginario del fútbol portugués.

E igualmente, el chileno Felipe Gálvez con "Rapaz", cortometraje de un grupo de ciudadanos que se toma la justicia por su mano al capturar a un ladrón callejero y torturarlo antes de la llegada de la policía.

La apretada agenda del certamen la completará en la selección oficial el homenaje con "O grande circo místico" a la figura del Cinema Novo brasileño Carlos Diegues, dentro de unas sesiones especiales donde el español Raúl de la Fuente llevará "Un día más con vida", "biopic" animado sobre el reportero Ryszard Kapuscinski.

La Cinefundación, que busca hallar nuevos talentos entre las escuelas cinematográficas, contará por su parte con proyectos de Chile ("El verano del león eléctrico"), Argentina ("Cinco minutos afuera") y México ("Los tiempos de Héctor").

Una apuesta de futuro que también apoyará al brasileño Joe Penna, con "Arctic" en las sesiones de medianoche, y convivirá con cineastas ya consagrados, como el mexicano Emilio Fernández y el argentino Fernando "Pino" Solanas, de quienes se proyectarán en la sección oficial de Clásicos "Enamorada" y "La hora de los hornos".