Sabe que está ante una de esas oportunidades que le pueden "cambiar la vida". A miles de kilómetros de Tenerife, isla en la que reside desde hace cuatro años, la joven Violetta Tyurkina atiende la llamada de EL DÍA. Está estrenando el título de primera finalista de Miss Rusia, un título que le dará la posibilidad de representar a su país en el certamen de Miss Universo. Aunque acumula diferentes experiencias en la pasarela -comenzó a desfilar cuando tenía 15 años-, el modelaje no es algo que entrara en los planes de los padres de una joven nacida en la ciudad de Belgorod: "No existen antecedentes en mi familia; es más, al principio a mi padre no le hizo mucha gracia que me pudiera dedicar a esto. En pueblos pequeños, como en el que yo crecí, muchas personas tienen una idea errónea de la moda", relata con un perfecto español sus primeros coqueteos con un sector que en Tenerife le permitió lucir los diseños creados por Sedomir Rodríguez de la Sierra y Arena Negra. "Afortunadamente, mi familia cambió de opinión y ahora se han convertido en mi primer apoyo", agradece una joven que estudió Bachillerato en un colegio de Costa Adeje.
Violetta suma otras experiencias como modelo en ferias que ya tienen un gran calado en la Isla -ya ha participado en Feboda y en Tenerife Moda- y una participación en la gala de elección de la Reina del Carnaval de Santa Cruz de Tenerife 2017, con una fantasía que llevaba la firma de Daniel Pagés. "Miss Rusia es el certamen de belleza de mi país y poder formar parte de él es un sueño para muchas chicas", remarca sin desviarse ni un solo milímetro de los estudios de Administración y Dirección de Em-presa que realiza en la Universidad European School of Management (ESM) de Tenerife.
Violetta tiene claro que su formación académica sigue estando por delante de los tacones, diseños exclusivos y elegantes maquillajes y peinados: "Ya veremos lo que me reserva el futuro, pero los estudios son en estos momentos una prioridad", sostiene segundos antes de resumir cómo se precipitó su inclusión en Miss Rusia. "Se pusieron en contacto conmigo a través de Instragram; me contaron que estaban interesados en que participara en una prueba de selección y lo hice. ¡Todo empezó en las redes sociales!", rescata una adolescente que recuerda el magnetismo que generaba ese certamen cuando era una niña: "Como cualquier otra chica, el deseo de optar a esa corona era evidente", reitera sobre una cita que está llena de complejidades: "Este es un gran reto, una experiencia que pretendo aprovechar en lo personal y en lo profesional. Acudir a Miss Universo no solo requiere tener un buen físico; también es necesario contar con una profundidad intelectual para compaginar los estudios, el conocimientos de diferentes idiomas y tener una buena actitud en la vida: saber qué es lo que quieres hacer con ella", remarca.
Mientras aguarda la llegada de su próxima aventura internacional, Violetta no ha dejado de hacer las cosas que le dan sentido a su vida: "Soy una chica que se apoya en su familia, pero también una persona inquieta que le gusta viajar y los deportes, especialmente el surf, el snowboard, el voleibol o el pádel", enumera. "Nunca estoy parada y el mundo de la moda me aporta seguridad en mí misma".
Otra de las cosas que no piensa cambiar, por ahora, es su residencia en Tenerife. "Volveré en cuanto pueda. Mi intención es continuar residiendo en la Isla. Es un lugar que genera buenas vibraciones. Es un lugar de todos, es decir, donde nadie es mal recibido. Da igual el lugar del que procedas porque Tenerife transmite una calidez que no se consigue en todos los lugares. Su gente es amigable y simpática; además, es un sitio seguro en el que puedes encontrar lo que necesitas para ser más agradable tu vida", describe una joven que ahora mismo no concibe su día a día lejos del Archipiélago.