La huella del arte siempre ha estado muy presente en su filmografía. Desde la plasticidad pop de sus inicios con ''Pepi, Luci y Boom'' y ''Laberinto de pasiones'', hasta la puesta en escena más minuciosa y esteticista de títulos como ''Todo sobre mi madre''.

Sus referencias (casi) constantes a Hopper, Magritte o Rothko son el resultado de la búsqueda artística de un cineasta empeñado en generar un estilo único.

Ahora, el arte devuelve la mirada a Pedro Almodóvar a través de una exposición retrospectiva, que ilustra su filmografía y el 25 aniversario del Festival Solidario de Cine Español de Cáceres, que promueve la Fundación ReBross.

Una veintena de artistas españoles comprimen el cine del director manchego en imágenes conceptuales que resumen su filmografía. Las piezas crean y actualizan el universo almodovariano, que ha mutado de la frescura irreverente a la narración estilística de complejidades emocionales.

Obras que configuran un collage de todos los excesos visuales y sentimentales del cine de Almodóvar, y que se pueden disfrutar (y adquirir por 300 euros a través de la ''web www.expoalmodovar.com'') en la cacereña Sala El Brocense, hasta el próximo 30 de marzo.

Las obras están impresas en metacrilato y la recaudación de la venta se destinará a familias españolas en riesgo de exclusión social, en consonancia con la finalidad del festival cacereño, cuyo lema es ''Ver cine español ayuda''.

La muestra titulada ''Tú y yo no somos como todo el mundo'', una frase que el personaje de Antonio Banderas dice a Elena Anaya en la cinta ''La piel que habito'', sirve de reflejo de la evolución estilística del director.

A través de un particular espejo colorista se puede contemplar la mirada de un cineasta dividida en pedazos (como al director le gusta hacer con esos planos imposibles de juegos de espejos y miradas partidas).

Pedazos que navegan entre la subversión, la pasión, la estética, el color típico de sus películas, el sentido del humor, el sexo y la identidad sexual. Y que ofrecen una evolución de su estilo que tan solo se rompe en ocasiones.

De las ilustraciones coloristas del Almodóvar más cómico con ''Mujeres al borde de un ataque de nervios'', que recoge a los personajes en torno a una batidora; pasando por el tono más oscuro y dramático de ''Todo sobre mi madre'', como si se tratara de una viñeta extraída de una novela negra; hasta el más frío y analítico de ''Los abrazos rotos'': una radiografía de dos manos que intentan acariciarse.

Esta transición del director, evidenciada en esta exposición, solo se rompe con el colorido trabajo que ilustra ''Los amantes pasajeros'', cuando intentó recuperar (sin éxito) su transgresor humor que tanto le reportó en la movida madrileña; y con emocional ternura de realismo mágico que desprende uno de sus mayores éxitos de crítica y taquilla: ''Volver''.

El comisario Miguel F. Campón destaca que la muestra "puede verse como una representación de la ilustración española actual".

Una comunidad "de seres impulsados por un destino extravagante, que explora las diferencias infinitas de la existencia. Y que desvelan un universo alternativo de posibilidades estéticas".

La muestra no hace un recorrido cronológico, sino que propone un juego expositivo, "le cede la palabra al espectador; aguarda hasta que aparecen sus emociones vitales", ya que la sala se ha transformado en un discreto salón de espejos.

La superficie reflectante del metacrilato con que han sido producidas las obras llenan el espacio de reflejo.

Es decir, "los espejos, tantas veces utilizados por Almodóvar como artefacto poético, son aquí una zona de encuentro entre yo y el otro", en palabras del comisario, que ha aportado la puesta en escena, en distintos niveles y con una sala oscura donde se proyectan algunas de las escenas más memorables del cineasta.

La parte artística la aportan los ilustradores Fermín Solís, Aitor Saraiba, Sean Mackaoui, Chema García, Borja González, Julio Antonio Blasco, Julia Bereciartu, Cayetano Casas, Mayte Alvarado, Loreta Lion, Ester García, Cristina Borobia, José Luis Ágreda, Fidel Martínez, Javier Jubera, Marta Altés, Lou Germain, Jonatan Carranza, Sito Recuero y María Polán.

El próximo 17 de marzo Almodóvar regresará a Cáceres, una de las localidades extremeñas en la que vivió, para recibir el Premio San Pancracio de Honor, de este festival solidario.