La Casa del Vino ocupa la octava posición de la clasificación del portal Tripadvisor, tomando como referencia los comentarios y la calificación de los visitantes.

De las 285 opiniones recogidas, un total de 107 (38%) consideran este espacio excelente; 111 (40%) lo califican como muy bueno; 47 (16%) le dan la nota de normal; 10 referencias (1%) lo evalúan como malo y otras tantas (1%) lo incluyen en la categoría de pésimo.

Las nacionalidades de los visitantes que han vertido opiniones resultan diversas, destacando los españoles (175), seguidos por británicos (52); alemanes (39); franceses e italianos (20); rusos (10); holandeses (6); daneses, polacos, portugueses y suecos (2), además de japoneses y noruegos (1).

El edificio en el que se asienta la Casa del Vino La Baranda representa un destacado ejemplo de las haciendas históricas rústicas que, ubicadas en las medianas del norte de Tenerife, se han conservado en el tiempo, construidas por sus propietarios como primera o segunda residencia de verano, con el objeto de centralizar la actividad agraria.

El estilo de la casa responde a las características propias de la edificación canaria de la época, con aspectos constructivos y al detalle de maestros artesanos de origen portugués, castellano y extremeño, destacando sobremanera el techo de la ermita por su belleza y colorido.

La finca La Baranda, incluyendo la casona, fue adquirida por el Ayuntamiento de El Sauzal en 1989 y cedida gratuitamente al Cabildo de Tenerife en 1992, con el objeto de que allí se instalara la Casa de la Vid y del Vino.

El museo contempla una sala temática, ubicada en la antigua bodega de vinos tintos de la original hacienda, que ofrece un atractivo recorrido desde el que se repasa la historia de los vinos de Tenerife y su importancia.

La vinoteca muestra la gama más completa de vinos con Denominación de Origen producidos en la Isla, donde el visitante puede elegir entre más de 300 referencias, entre blancos, rosados, tintos, espumosos, dulces, barricas, crianzas, malvasías, etc.

En los antiguos cuartos de aperos se integra la sala de catas, que ofrece regularmente degustaciones de vinos, donde están representadas las cinco denominaciones de origen de la Isla, y los tres tipos: blancos, rosados y tintos, acompañados por singulares quesos y frutos secos. También se pueden degustar las exquisitas mieles de Tenerife en sus distintos tipos.

El restaurante brinda al visitante los platos típicos canarios con una laboriosa y cuidada cocina, desprendiendo un espléndido valor culinario. Desde los pescados a las carnes, pasando por sabrosos mojos, las papas, los quesos, hasta la fina repostería canaria.

En un edificio anexo se ubica el Centro de Visitantes de la Casa de la Miel, nacido para responder a la creciente demanda de información sobre las mieles de Tenerife y con el objetivo de reivindicar este singular producto a través del conocimiento de su origen y de los medios que se articulan para garantizar su calidad.

La exposición combina medios audiovisuales e interactivos con elementos tradicionales de la actividad apícola de Tenerife, de manera que descubre el papel de las abejas, la flora y el trabajo de los apicultores y la singularidad del protagonista indiscutible: la miel de Tenerife.