Mujeres que cuentan en primera persona cómo se consigue ganar la batalla al cáncer de mama, sus estrategias para hacerle frente, las sensaciones que experimentan cuando llega el momento de recibir quimioterapia o radioterapia, la espera que se abre hasta que llega la intervención y la posterior reconstrucción de la mama...

Esas y otras muchas vivencias acumulan las más de 40 mujeres que esta tarde, a partir de las 18:30 horas, participarán en el XIII desfile benéfico de Ámate que se celebra en el recinto ferial de Santa Cruz.

"El cáncer de mama no tiene edad. Este año participa desde una chica de 25 años a una de 70", asegura Carmen Maldonado, miembro de la Junta Directiva de Ámate y voluntaria en hospitales, respecto a una aventura inolvidable. La iniciativa de la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama de Tenerife (Ámate) ya ha pasado por diferentes salas hasta llegar al espacio que gestiona el Cabildo. "Ya no cabemos en otro lugar: ni nosotras en el escenario, ni el público en las butacas", dice Margarita Rodríguez, quien lleva participando en el desfile desde que le diagnosticaron la enfermedad hace diez años. Ella es una de las más veteranas y, aunque en esta ocasión no desfilará en traje de baño, habla con la ilusión en los ojos y sabiendo que lo que allí va a acontecer es necesario para seguir luchando. "Este es un desfile muy especial por el calor y el apoyo que transmiten los espectadores; el público que va a vernos -añade- es gente que ha vivido el cáncer de cerca, pero también personas que no están afectadas, que te conocen y que saben que es una buena causa".

Como Margarita, otras muchas mujeres son "repetidoras". Saben que esta reunión es la excusa para celebrar que un año más le han ganado la batalla a una enfermedad que siembra el pánico pero que, sin embargo, se puede superar. "Hace dos años, en el desfile, participaba una compañera que estaba embarazada. Fue un momento emotivo verla con su barriguita pintada. En la edición de 2016 el bebé que llevaba entonces en su vientre era un modelo más de aquella pasarela. Fue bonito un ejemplo de superación", aseguran entre ellas.

El acto, que pretende vender unas 1.500 entradas, tiene como pilar el desfile de moda, quince diseños de "body paint", la actuación del Grupo Carezza -el tema "Con la fuerza de mi corazón" junto a la cantante Miriam Reyes lo han dedicado a Ámate-, así como la del Centro Internacional de Danza. El voluntariado, más de cincuenta personas este año, pone todo de su parte para colaborar y lograr que todo salga según lo previsto.

"Es el segundo año que la Fundación La Caixa participa. Vendemos las rifas, ayudamos en la entrada y estamos en el backstage... Es un verdadero placer, entre otras cosas, porque cuando ellas aparecen en el escenario se transforman en gigantes", exalta Lorena Perdomo sobre el rol que juegan los voluntarios.

Las modelos ofrecerán las últimas tendencias, lo que se comercializa para la temporada que llega en los establecimientos generosos que les permiten que sean ellas mismas las que decidan qué es lo que se quieren poner: no solo de trajes de fiesta, sino también de moda baño y lencería para alzarse sobre los tacones que les ayudan a observar, desde las alturas, la fuerza que han sido capaces de tener para "salir sin complejos", apostilla Maldonado. "La parte testimonial tiene mucho que ver, llega más cerca, tanto en las charlas como en las visitas hospitalarias. Yo tenía un cáncer muy avanzado, de estadio tres, con mal pronóstico y cuando las pacientes me ven dicen: yo no voy a ser menos. Es importante tener predisposición, el estado de ánimo es necesario para superarlo". "Tener el apoyo de la psicóloga Roberta fue una salvación", agradece Josefa Muñoz, quien suma ya siete años desde que participó por primera vez en el pase de modelos. "A mí me da vergüenza salir en público, pero allí se te quita con el apoyo de todas. La primera vez que desfilé no podía soportar la peluca y decidí salir sin ella: mostré lo que era mi pelo, muy chiquitito pero mi pelo", recuerda con una amplia sonrisa Muñoz antes de plasmar una idea llena de vitalidad: "Seguimos siendo mujeres, aquí no se acaba el mundo. La lucha empieza a partir de ahora".

Otras de las participantes contarán este año la experiencia como debutantes en una acción que las hace sentirse fuertes y, sobre todo, capaces de acercar la asociación a otros puntos del Archipiélago. "Quiero llevarme a La Palma todo el apoyo de las personas que realizan esta magnífica labor", confíes Carmen Nieves Medina.

Mary Carmen Maldonado Directiva de ÁMATE y voluntaria en hospitales

Margarita Rodríguez

Diez ediciones en el desfile benéfico

Carmen Nieves Medina

Afectada por el cáncer de mama hace un año