Hay un dicho infalible que suele retratar a los farrucos; a aquellos que se ven como los reyes del mambo y que bajo presión son capaces de fabricar lindezas como esta: "De aquí no me pasa nadie; me la suda lo que piensen todos estos", dijo a media voz anoche un "jefe" de colocación de vallas con la intención de que fuera escuchado por varios centenares de personas que curioseaban en los alrededores del edificio de Correos y el Cabildo de Tenerife. A este literato no le cogieron los besos porque Matt Damon es grande. Ordinarieces al margen, ya se sabe el viejo dicho de "si quieres conocer a Manolillo, dale un carguillo", el primer día de rodaje en el entorno de una agitada plaza de España se cerró sin noticias de Jason Bourne.

Los dueños de las azoteas más elevadas fueron untados convenientemente para evitar que no se escapara ni un solo plano aéreo. Algo grande estaba a punto de ocurrir sobre la explanada que protege al Tigre. Decenas de agentes y un generoso grupo de manifestantes se enfrentaron a gritos en los albores de la gran mentira griega. Motos que iban de un lado a otro, consignas reivindicativas y alguna que otra bandera helena. Solo faltó Alexis Tsipras. Pero no el primer ministro herido de muerte por la siempre aplastante economía germana, sino el Tsipras de rostro sonriente que mostró al mundo más utópico los valores de una Syriza que no ha podido ir mucho más allá de un simple efecto champán. En medio de ese caos se supone que estaba Matt Damon.

Lo de Matt Damon era previsible. Sobre todo, después de escuchar al alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, declarar a media mañana de ayer que "aún no he tenido la oportunidad de conocerlo, pero hay una foto circulando por aquí en la que se le ve cuadrado", manifestó en relación a una imagen que Frank Marshall, productor de la quinta entrega de Bourne, colgó en Twitter tras llevar a cabo una prueba de luz. Esa es la imagen más cercana que existe hasta el momento del actor bostoniano.

El primer edil capitalino, en la misma comparecencia informativa, dijo que el ganador de un Oscar por su papel en "El indomable Will Hunting" está hecho un toro y que alguno lo ha visto haciendo "runing" por Los Campitos. Los que tuvieron dificultades para completar su entrenamiento fueron los deportistas que se metieron en medio de la manifestación por inercia.

Y es que al final siempre hubo un empleado (mucho más educado que el mencionado Manolillo el del carguillo) que amablemente les dio instrucciones para modificar su recorrido. Otros vecinos de la zona, con y sin perros, se cogieron alguna que otra calentura por las alternativas que les ofrecían para llegar al portal de su casa o poder entrar con su coche en el garaje. Al final, las ganas de curiosear se acabaron imponiendo a las lógicas restricciones que debe marcar un rodaje de estas dimensiones. Algo que sorprendió extremadamente a dos turistas franceses que, curiosamente, en el pasado habían vivido una aventura similar con el rodaje de unas escenas de Bourne en París.

En medio de un despliegue de seguridad digno de una recepción real se pudo ver alguna que otra escena curiosa. Por ejemplo, unos minutos antes de que un grupo de motoristas de la policía griega accedieran al perímetro en conflicto, uno de los agentes tuvo un bautizo un tanto desafortunado. Primero un operario que lucía una camisa negra con la leyenda "Bourne Legacy" (no se ha determinado aún el título de la película) tuvo que hacer presión en la parte trasera para que la moto bajara unos centímetros y el figurante pudiera subirse. El despropósito aumentó cuando el especialista (entre los motoristas hay efectivos de alguna que otra unidad de Policía Local) perdió la porra antes de ir a reprimir a los revoltosos. ¿Los nervios del principiante? Así maduró, más o menos, una jornada que se alargó hasta las primeras horas de la madrugada. Y es que el entorno de esta enorme batalla campal amaneció siendo el Tenerife de costumbre y se fue a dormir recreando un territorio de conflicto griego. Jason Bourne ya está haciendo de las suyas por estas coordenadas atlánticas, pero, por ahora, no se ha dejado ver. Si las cosas están como están, de los casos de Vincent Cassel o Tommy Lee Jones ni hablamos. Hermetismo casi total (salvo por Twitter) en el desembarco tinerfeño de Bourne.

ficha técnica

"Bourne 5"

Título original: Sin determinar.

Estreno:29 de julio del 2016.

País: Estados Unidos.

Duración: 113 minutos.

Género: Acción.

Productora: Universal Pictures.

Dirección: Paul Greengrass.

Guion: Anthony Peckam y Andrew Baldwin.

Producción: Frank Marshall.

Intérpretes: Matt Damon, Vincent Casell, Tommy Lee Jones, Alicia Vikander y Julia Stiles.

Localizaciones: Tenerife (España) y Las Vegas (Estados Unidos).

las cifras

1.250 millones de dólares se recaudaron en concepto de taquilla por la exhibición en las salas de cine de "El caso Bourne" (2002); "El mito de Bourne" (2004);"El ultimátum de Bourne" (2007) y "El legado de Bourne". Precisamente, la más exitosa fue la segunda dirección de Greengrass; "El ultimátum de Bourne", con 442 millones de dólares de ingresos por la venta de entradas.

1.000 personas entre figurantes, especialistas, el equipo de dirección, especialistas y el reparto principal participan en la puesta en marcha de esta superproducción.

350 empleos temporales, no ligados con el rodaje en sí, se crearán en la Isla en el apartado de logística: luz, sonido, escenografías...

250 mil euros diarios generará a la economía local la grabación de la quinta entrega de una saga liderada por Matt Damon.

60 millones de euros, millón arriba, millón abajo, será el presupuesto inicial de una producción que va a sumar cinco semanas de rodaje en Tenerife.

2016 será el año del estreno de la película. La productora ha anunciado un traslado en la fecha de la "premier" -del 15 al 29 de junio- para impedir que el estreno coincida con la puesta de largo de "Star Trek" y "Ice Age 5".

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