Toledo fue un importante centro artístico y literario en el Siglo de Oro y parte de aquel legado cultural que ha llegado hasta hoy son los documentos que conserva el Archivo Histórico Provincial, entre ellos los firmados por Santa Teresa, Cervantes, Lope de Vega, Garcilaso, Tirso de Molina o el Greco.

Con motivo del Día Internacional de los Archivos, que se conmemora cada 9 de junio, el director del Histórico Provincial de Toledo, Carlos Flores, ha mostrado algunos de estos documentos y ha explicado, en una entrevista, que Toledo tiene un patrimonio documental "de primera magnitud" y que la ciudad es "una auténtica joya archivística".

No en vano, en apenas 500 metros de distancia se encuentran, en pleno Casco Histórico, cinco importantes archivos: el Histórico Provincial, el Municipal, el de la Catedral Primada, el Diocesano y el Archivo de la Diputación.

Es el patrimonio "que no se ve", ha afirmado Flores, de una de las ciudades con mayor concentración de archivos ya que a los citados hay que añadir, entre otros, el Archivo de la Nobleza del Hospital Tavera, el archivo de Castilla-La Mancha y varios privados.

El Archivo Histórico Provincial está situado en el antiguo convento de Jesús y María, en torno a un coqueto patio, y alberga casi nueve kilómetros de estanterías con unas 80.000 cajas con documentos de 73 instituciones.

En una "apreciación muy por encima", asegura el director, hay 80 millones de legajos, planos y documentos desde principios del siglo XIII hasta el año 2004.

Los documentos más antiguos están firmados en árabe e incluso hebreo, que era el idioma de los toledanos de la época.

Carlos Flores señala que el Archivo no tiene un único documento que pueda considerarse ''la joya de la corona'', sino un conjunto de ''joyas'' vinculadas, en particular, al Siglo de Oro, "cuando Toledo era una gran ciudad, sobre todo para temas artísticos y literarios".

En Toledo vivieron el Greco, Lope de Vega, Tirso de Molina, Garcilaso de la Vega y por allí pasó en varias ocasiones Santa Teresa de Jesús. De todos ellos hay pruebas en el Archivo porque todas iban al notario para aspectos cotidianos de su vida.

Lope de Vega, para alquilar su casa; Tirso de Molina y todos sus frailes del convento, para hacer una transacción económica; y de Garcilaso está su testamento original, porque aunque está fechado en Barcelona se abrió en Toledo donde vivía su mujer.

De Santa Teresa hay varios documentos que han sido recopilados en una exposición temporal abierta en el Archivo hasta el 30 de junio.

Entre ellos, el único -de este Archivo- que lleva la firma de la abulense, fechado el 30 de marzo de 1568 y que refleja la donación de sus casas y bienes que hace Luisa de la Cerda a Teresa de Jesús para fundar el monasterio de San José de Malagón (Ciudad Real).

En cuanto al Greco, Flores ha dicho con una sonrisa: "algunos documentos del Greco han suspirado cuando los hemos vuelto a dejar en el depósito, porque el año pasado tuvieron un trajín tremendo".

Por citar algunos, diez legajos relacionados con Doménicos Theotocópuli viajaron a Atenas como parte de una exposición temporal relacionada con el cuarto centenario de la muerte del pintor.

"La ciudad de Toledo fue durante los siglos XVI y XVII capital mundial de la cultura, y las personas que vivían o trabajaban aquí iban a los notarios y dejan su rastro documental", ha subrayado.

Carlos Flores también ha destacado la interesante información de la vida cotidiana que aportan los inventarios de bienes, protocolos notariales y pagos de tributos.

"Dan una idea perfecta de lo que hacían y tenían" aquellas personas en un momento en que se acudía al notario "con mucha frecuencia" porque era "bastante más barato que ahora" y porque la gente no sabía escribir y necesitaba un notario.

En su opinión, es "impresionante" el patrimonio documental de Toledo "que se puede enseñar a la gente sin necesidad de que sean investigadores", y de ahí ha surgido la iniciativa ''la calle de los archivos'' que se lleva a cabo precisamente hoy, Día Mundial de los Archivos, para mostrar de forma coordinada los edificios, documentos e historia de los archivos de Toledo.

Un asunto pendiente en el Histórico Provincial es el acceso a las nuevas tecnologías, ya que muchos usuarios demandan información por Internet y el Archivo no puede ofrecerla, únicamente de forma presencial o por correo electrónico.

Cada año el Archivo Histórico Provincial de Toledo atiende de media a dos mil personas, tanto investigadores que necesitan más tiempo y días o semanas de trabajo en la sala, como particulares que acuden a consultar trámites -en general, sobre el catastro- y que a veces sólo están unos pocos minutos.