Familiares y amigos y compañeros de profesión se han desplazado esta mañana al Tanatorio Norte de Madrid, donde ayer por la tarde se abrió su capilla ardiente, a dar su último adiós a la actriz Amparo Baró, fallecida a los 77 años en la capital española.

Anabel Alonso, que compartió con ella siete años en la televisiva comedia "7 Vidas" ha dicho de Baró al llegar al tanatorio que "más que una compañera, era una amiga".

"A raíz de este trabajo nos hicimos amigas, la considero una maestra, una mujer de la que aprendí mucho, honesta, sincera, que no se andaba con medias tintas y eso se agradecía", ha dicho Alonso.

La actriz ha recalcado "lo gran profesional" que era Baró, una actriz que "nunca fallaba, que siempre se lo sabía todo".

"Llegó al gran público con Sole de ''7 vidas'', pero era una gran dama del cine, del teatro y de la televisión y la tele le dio el espaldarazo del gran publico", ha añadido.

Alicia Borrachero, que coincidió con ella en la función "Agosto", la última que hizo en el teatro (2011), ha dicho a su llegada al tanatorio que la conoció poco pero que "fue un regalo de la vida" poder trabajar con ella en aquel montaje.

Borrachero ha destacado de ella "su grandeza y humildad", y ha recalcado que "era una mujer que amaba el teatro y la interpretación, una lección para todos los actores".

Como una "fuerza de la naturaleza", así ha recordado Emilio Aragón a la que ha calificado como "irreemplazable", una actriz que es "un ejemplo para todos", ha dicho.

Aragón ha hecho hincapié en la actuación de la actriz en "Agosto", obra de teatro que tuvo la "suerte" de ver y en la que Baró ofreció "una clase magistral" con su actuación.