La Fundación Cristino de Vera-Espacio Cultural CajaCanarias de La Laguna acoge una exposición temporal dedicada al artista catalán Joan Ponç, fundador del grupo Dau al Set.

Esta muestra reúne una colección de obras pertenecientes a museos, fundaciones y coleccionistas privados de Cataluña y rinde homenaje al artista en el 30 aniversario de su fallecimiento.

La muestra, su primera individual en el archipiélago insular, está comprendida por una selección bibliográfica, que contiene los dibujos realizados por el artista para la revista Dau al Set, y veinte obras -óleos y dibujos, pertenecientes a la etapa que mejor le caracteriza, la conocida por la de Dau al Set.

Joan Ponç comenzó a desarrollar su obra en los difíciles años de la posguerra española, en un ambiente artístico en el que predominaba el gusto por la pintura figurativa y pseudoimpresionista y rechazaba cualquier intento de renovación artística.

En 1948, Ponç, junto a Antoni Tàpies, Modest Cuixar y Juan José Tharrats, el poeta Joan Brossa y el filósofo Arnau Puig, fundó el grupo de vanguardia Dau al Set, que constituyó un revulsivo en el desértico panorama cultural de aquellos tiempos.

Sus miembros recuperaron la esencia del surrealismo gracias a la influencia que este movimiento había ejercido, en los años treinta, en ciertos sectores culturales de Barcelona y al contacto personal que establecieron con Joan Miró.

Proponían la reinterpretación del mundo de los sueños como una de las vías fundamentales de la liberación de la psique. Defendieron lo instintivo frente a lo racional y buscaron la libertad creativa frente al arte académico. A través de la exploración del subconsciente y de todas las posibilidades de la mente humana, concibieron imágenes de un universo oscuro plagado de seres misteriosos e inquietantes.

Entre los miembros de Dau al Set, Joan Ponç fue quien mejor encarnó estos postulados estéticos y vitales, a los que se mantendrá fiel durante toda su existencia.

Alejado de los circuitos comerciales y de las corrientes artísticas que aparecían en Europa y Estados Unidos, consolidó un lenguaje propio, producto de los complejos y malformaciones sensibles que anidaban en su interior.

Para él, el Arte no era sino una introducción a los secretos que encerraba su espíritu y, a través del mismo, conseguía liberarse, como en un acto mágico, de todas las terribles cargas que tenía en sus entrañas. Así, a lo largo de su trayectoria profesional, Ponç alimentó su producción pictórica y dibujística con una iconografía enigmática, relacionada con la teratología medieval y los libros de alquimia, repleta de alegorías y simbologías, que desvela y profundiza en los miedos, preocupaciones y angustias escondidos en el alma del pintor.

A través de esta muestra, se podrá observar los gouaches, "alucinaciones", personajes inquietantes, zoologías fantásticas y paisajes imposibles, e introducirse en el universo "mágico" de una de las personalidades artísticas más misteriosas del siglo XX.

La exposición podrá contemplarse hasta el día 19 de julio en la Fundación Cristino de Vera-Espacio Cultural CajaCanarias. Paralelamente, se ha desarrollado un amplio programa de actividades para todos los públicos: visitas dinamizadas y talleres para escolares, talleres familiares, visitas comentadas para adultos y la conferencia titulada "Joan Ponç: la fascinación por las sombras en la penumbra" a cargo de Sol Enjuanes Puyol, profesora de Historia del Arte de la Universidad de Barcelona.