Gerardo Herrero (Madrid, 1953) ha desarrollado un olfato especial para el cine, bien para escribir guiones, dirigir una película, o buscar financiación para abordar nuevos proyectos cinematográficos en los que confía, como ocurre actualmente con "Tiempo sin aire", que se rueda hasta el 11 de abril en diversos escenarios de Tenerife, donde se desarrolla casi toda la trama de la película.

Su extensa filmografía como director, reflejada en una veintena de títulos, cuenta con filmes como "Territorio comanche" (1997) o "Malena es un nombre de tango" (1995). Como productor, más de medio centenar de cintas, entre las que destacan "El pianista" (1998), "Guantanamera" (1995) o "El secreto de sus ojos" (2009), de Juan José Campanella, con la que obtuvo el Oscar a la Mejor Película de Habla no Inglesa

Herrero, que fundó en 1987 con Javier López la productora Tornasol Films, está detrás de "Tiempo sin aire", película en la que gran parte de la trama se desarrolla en localizaciones de Santa Cruz, La Laguna, Parque Natural de Anaga, Garachico y Buenavista, espacios en los que han rodado escenas los cuatro protagonistas del filme: Carmelo Gómez, Juana Acosta, Adriana Ugarte y Félix Gómez, bajo la dirección del tándem Samuel Martín y Andrés Luque Pérez. Es un thriller con historia de amor, que tendrá una duración de unos cien minutos y se estrenará entre octubre y abril del año que viene, si todo sale bien. Participan en ella unos quinientas extras locales.

Este hombre entregado a la industria del cine conoce al detalle los entresijos de este complejo mundo del séptimo arte y de su difícil financiación. Por eso ha sabido aprovechar las ventajas fiscales que ofrece Canarias para el rodaje de películas, además de sus excelencias como plató. "Ya habíamos hecho una película aquí, La ignorancia de la sangre, basada en un libro de Robert Wilson, cinta dirigida por Manuel Gómez Pereira. Es un thriller protagonizado por Juan Diego Boto y Paz Vega. Rodamos aquí dos semanas".

Esta tendencia a rodar en las Islas, en la que busca empresarios que quieran invertir en cultura, está corroborada por "Tiempo sin aire". "Vimos la posibilidad de hacer esta película y hemos generado una productora local, Hernández y Fernández Producciones Cinematográficas. Nuestra idea es hacer cuatro o cinco películas si podemos".

"Canarias posee una variada diversidad de paisajes para rodar. Tiene ciudad, campo, montaña, playa... en fin, es el sitio ideal. Lo que tratamos nosotros, no somos una productora norteamericana, es rodar lo máximo posible en el sitio donde se desarrolla la película. De las siete semanas de rodaje de Tiempo sin aire, cinco transcurren en Tenerife, menos dos en Colombia. El rodaje de hoy, en Garachico, es como si fuera Colombia. La historia se desarrolla realmente en Tenerife".

La voluntad de Tornasol Films y su socia Zebra Producciones, junto a la nueva productora local, es abordar próximamente, en junio, otra película en Tenerife, "Felices 140", que estará dirigida por Gracia Querejeta y cuenta en el reparto con la presencia de Maribel Verdú, una de las musas de este. Y es posible que otra comedia en octubre.

"A la que dirigirá Querejeta y transcurre aquí, también incorporaremos a actores canarios. Cuanto más tiempo estemos y más películas hagamos habrá más gente local", aunque no pudo precisar qué actores isleños participarán en el filme.

Herrero es claro al explicar qué requisitos debe cumplir un proyecto antes de aceptar producirlo, aunque la realidad ha demostrado que lo que domina son las coproducciones. "La película es un prototipo que hay que salir a vender, porque tiene unos costes importantes. Hay que buscar socios. La primera fase es tener un guion de una historia que sea factible estrenar y que tenga un público. Luego buscar quién quiere colaborar y comprar los derechos, fundamentalmente televisiones. Buscar financiación, exteriores, socios para el proyecto, actores, director, técnicos, etcétera. Sacar una película adelante es un proceso muy largo, lleva años, porque es mucha gente la que se implica".

Su buen olfato para detectar qué tipo de películas pueden tener éxito le inclina a afirmar que actualmente puede interesar la comedia. "Ahora es lo que más funciona. Nunca sabes, todo tiene que ver con épocas. En el cine nunca sabes qué tendrá éxito; si no, lo harían los banqueros. No hay fórmula para saber qué película va a funcionar".

Con respecto al panorama actual del cine español, considera que "es difícil, porque no está muy cuidado por el Estado y los políticos. Desgraciadamente, menos que en otros países. Hay una diferencia brutal. Por otro lado, hay talento, diversidad. España es un país al que le va bien la pintura, la literatura, el cine, la cultura... Cada vez los actores son mejores, está habiendo más generaciones y la televisión está dando bastante trabajo. Creo que el cine español está ahora en un momento complicado, pero espero y deseo que vaya a despegar y va a haber buenas películas que lleguen a la gente. De todas formas, la gente ve muchas películas, otra cosa es que las vea en el cine, pero entre televisión de pago y abierta cualquier película tiene un millón de espectadores".

Él tiene muy claro que el cine español camina "hacia una reconversión. Las pantallas y las proyecciones de calidad irán poco a poco entrando en las casas y el cine español tendrá que reconvertirse a eso. Tendrá que buscar coproducciones internacionales para luchar por encontrar ese hueco. El cine, como todas las artes, tiene un componente de creatividad, pero el cine genera más industria. El cine español necesita encontrar una salida, porque hay muchísimas ganas de cine, mucha gente estudiando en las escuelas de cine que quiere dedicarse a eso. Hay mucha gente que hace cortometrajes como proceso formativo. Ojalá, no puedo saber el futuro, pero espero que sí haya dinero para poder hacer buenas películas", confesó.

Este veterano cineasta es muy crítico con el denostado IVA cultural. "Es una pelea en la que todo el cine está de acuerdo, como todo el mundo de la cultura. Los países que han tenido ese IVA lo han bajado. Ni Portugal tiene un IVA del 21 por ciento. No hay un país que lo tenga, además esto origina que la competencia sea desigual. Nos dicen que estamos en Europa para algunas cosas, pero para otras no. Es un error, ¿por qué la declaración fiscal es más alta en un país que en otro? En esto hay una unidad absoluta en el cine y diría que en toda la cultura española. Por otro lado, ¿porqué el libro tiene un IVA reducido y el resto de la cultura no?, será porque las editoriales también tienen periódicos. Tiene que haber igualdad".

Cuestionado sobre qué opina del fenómeno "crowdfunding", precisó que es muy interesante. "Es una manera de buscar financiación, sobre todo para la gente que empieza, para proyectos muy arriesgados. No sirve para la gran industria, pero sí para la gente que quiere empezar sus pequeños proyectos en el cine, el teatro o la música. Lo que sí me parece muy mal es lo que ha hecho el gobierno de regular que no pueda haber más de una cantidad determinada. Eso limita la creatividad. ¿Porqué tantas ganas de ponerle siempre puertas al campo".