Esta semana, histórica para muchos, será recordada a lo largo del tiempo en las Islas, pues tras años de negociaciones Canarias por fin cuenta con un Estatuto de Autonomía acorde a la realidad social y política del Archipiélago en el siglo XXI. La reforma del texto de 1982, aprobada el miércoles en el Senado, dota a Canarias de unas herramientas -mayor techo competencial y nivel de autogobierno- que, tal y como subrayó el presidente del Gobierno autónomo, Fernando Clavijo, van a permitir a los canarios "escribir con su propia letra su futuro". No cabe duda de que se trata de un salto de gigante en lo que supone la capacidad de decisión sobre el camino que debe seguir esta tierra, pero también -conviene no olvidarlo- la asunción de una gran responsabilidad por parte de los canarios, que ahora disponen de más instrumentos para determinar la senda que debe elegir al Archipiélago. Entre las principales modificaciones al documento de 1982 cabe destacar el anclaje o blindaje del Régimen Económico y Fiscal (REF), desvinculándolo del sistema general de financiación autonómica, lo que le da máximo rango legal y evita que su aplicación esté al albur de interpretaciones arbitrarias o del momento político que se viva en España. Además, la reforma otorga a las Islas capacidad de decisión en Costas y aeropuertos, reconoce como aguas canarias las que están integradas dentro del perímetro del Archipiélago y aumenta de forma notable la posibilidad de influir en un buen número de materias.

Estas mayores cuotas de autogobierno coinciden con las demandas realizadas, desde hace mucho tiempo, por este periódico, incluso en etapas en las que no era bien visto por el poder establecido, que prefería mantener una postura contemporizadora. Al igual que entonces, EL DÍA va a mantener una posición vigilante, y combativa si hace falta, con el objetivo de que se busque lo mejor para los canarios. Las herramientas que otorga el nuevo Estatuto de Autonomía aprobado el miércoles son muchas y deben ser aprovechadas para que las Islas se sitúen a la vanguardia del país. Ese es su fin. Igual que el del recién aprobado REF en sus aspectos económicos. Otro instrumento cuyo valor estará en función de que los niveles socioeconómicos de Canarias -empleo, renta media de los hogares...- dejen de estar a la cola.

También esta semana, el presidente del Gobierno estatal, Pedro Sánchez, se comprometía ante su homólogo canario, Fernando Clavijo, a desbloquear todos los asuntos pendientes que su Ejecutivo tiene con las Islas, y que forman parte de lo que se ha venido a denominar "agenda canaria". Habrá que estar muy atentos al cumplimiento de las promesas realizadas por Sánchez, pues se acaba el año 2018 y hay una buena cantidad de inversiones en juego, pendientes de la firma de convenios y de que se permita gastar al Gobierno canario el superávit de sus cuentas. Sería una irresponsabilidad imperdonable que existan más demoras por no tener asegurada una foto.