El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, ha asegurado hoy que si bien no es partidario de aplicar el artículo 525 del Código Penal, en él se establecen penas de multa para quienes atenten contra los principios religiosos, cualesquiera que sean.

Carlos Alonso realizó este apunte durante unas declaraciones en las que insistió en que no se debe confundir la transgresión, que es consustancial a las fiestas del carnaval, con dañar los sentimientos de muchas personas, lo que en su opinión se produjo durante la gala drag del carnaval de la capital grancanaria.

Se refiere así al número vencedor en la gala Drag Queen de Las Palmas de Gran Canaria, que llevó a cabo Drag Sethlas con una actuación con un vestuario que simulaba una imagen de una Virgen y la crucifixión de Cristo.

El presidente del Cabildo de Tenerife criticó ayer en su cuenta de Twiter la actuación de Drag Sethlas, y hoy ha manifestado que tanto el travestismo como las críticas al clero son consustanciales a las fiestas del carnaval.

Recordó que durante un tiempo el carnaval estuvo prohibido en España y en Santa Cruz de Tenerife se mantuvo como fiestas de inviernos gracias a un obispo, e insistió en que sus comentarios no se deben a que se critique a la Iglesia católica.

La crítica es porque, en su opinión, se dañaron los sentimientos de muchas personas que tienen creencias católicas, y si bien reconoció que hay libertad de expresión y defiende la trasgresión deben respetarse siempre los principios de otras personas.

"Lo único que digo es que en esa gala hubo personas que se sintieron ofendidas" porque se atentó contra sus principios personales y al ser preguntado que también es posible que a alguien le ofenda una cruz católica en la calle respondió que cada uno es libre de expresar lo que piensa, de modo que si alguien siente esa ofensa "que lo diga".

Consideró que se le ha dado mucha trascendencia a su comentario personal e insistió en que "faltaría más" que no pudiera expresar su opinión por ser presidente del Cabildo de Tenerife.

"Otra cosa es que no guste lo que diga o se critique lo que diga", reconoció Carlos Alonso.