El Parlamento de Canarias vivió ayer uno de los momentos más convulsos de la legislatura, con una reunión de la Mesa que se prolongó más de una hora y que retrasó durante ese tiempo un pleno que se presumía corto tras las propuestas de resolución del debate. Se pretendía modificar el reglamento de la Cámara para adaptarlo al nuevo Estatuto y ahondar en la igualdad de la mujer y contra el lenguaje sexista, pero una enmienda presentada a última hora por la Agrupación Socialista Gomera (ASG) para intentar que baste con 3 diputados para tener grupo propio convulsionó el inicio de la sesión y, al final, hizo que Casimiro Curbelo impidiese la votación recurriendo al artículo 90, que puede invocar porque su partido representa tres cuartas partes de los representantes de su Isla.

Hasta ahora, los partidos necesitaban alcanzar los 5 diputados para obtener grupo, lo que le permite disponer de un fondo fijo y tener mayor representación que si se forma parte del mixto. Tras las elecciones andaluzas y la fuerte irrupción de VOX, Curbelo se ha mostrado muy preocupado con la posibilidad de tener que compartir el Grupo Mixto, que hoy ocupa su formación en solitario, con este partido ultraderechista. Por eso, ha buscado diversas alternativas para evitarlo y en el pleno de ayer intentó introducir una enmienda que, en principio, le apoyaba CC, pero que otras formaciones, especialmente Podemos y NC, rechazaron en la reunión urgente de la Mesa por entender que se trataba de un cambio en profundidad del reglamento que no podía colarse de esa forma.

Es más, esos grupos estaban dispuestos a presentar el correspondiente recurso, con lo que no podría aprobarse en lo que queda de mandato ante la falta de tiempo. Al final, y tras las pertinentes consultas con los servicios jurídicos, la presidenta anunció al comenzar la sesión que se había rechazado la posibilidad de presentar esa enmienda y se pasó al debate del resto de cambios en el reglamento. No obstante, Curbelo y sus otros dos diputados se pasaron buena parte del debate analizando el reglamento y, en concreto, ese artículo 90, que finalmente fue esgrimido por el presidente gomero para evitar la votación por entender que se estaba perjudicando a su Isla.

Esto hizo que Carolina Darias emplazara a los portavoces a una junta durante la mañana de hoy en la que se decidirá cuándo se vota, si en un pleno ordinario próximo o extraordinario, mientras la diputada del PSOE criticaba a Curbelo al poco en una nota por usar su derecho a veto por tener el 75% de la representación de la Isla solo para algo partidista y no para servicios básicos o infraestructuras de La Gomera.

ASG argumentó que hasta 12 comunidades permiten obtener grupo con solo 3 diputados, si bien varios partidos de la izquierda le reprochan a Curbelo que se opusiera a la lista regional argumentando, entre otras cosas, que suponía un mayor gasto público cuando un aumento así de los grupos casi triplicaría el dinero. Desde Podemos, diputados como Juan Márquez le censuran por identificar su persona con su Isla, mientras que Conchi Monzón y Esther González (NC) piden igualarse a otras regiones para evitar que el 0,5% de los votos de ASG "tengan el 5% de los escaños y marquen la agenda de todos los canarios".

Aunque no se votó, todo apunta a que la representación de la mujer quedará en un 40-60%, en línea con la Ley de Igualdad.

Tras la polémica por el reglamento, el segundo punto del pleno posterior al debate de la Nacionalidad reeditó la batalla entre Curbelo y Podemos, a los que acusa de no entender la doble insularidad y concebir Canarias solo desde las grandes ciudades, lo que fue muy aplaudido por CC. El punto consistía en la toma en consideración del cambio de la ley de Cabildos para impedir lo que la mayoría de grupos creen un riesgo de incompatibilidad injusto y discriminatorio para con los presidentes insulares, ya que no ocurre igual con los alcaldes que quieren ser diputados. En realidad, y según recalcó Socorro Beato (CC), se pretende aclarar la situación y evitar cualquier duda tras aprobarse la nueva ley de Cabildos a finales del anterior mandato, lo que no impidió, sin embargo, que Curbelo y Belén Allende hayan ejercido los dos cargos.

El PP no aprecia ningún motivo para esta compatibilidad ni en la Constitución, ni en la ley electoral ni en el Estatuto, mientras que NC apoyó la toma en consideración porque, en contraste con los rechazos que ha sufrido a propuestas suyas como la tasa turística, cree que el debate es clave. Además, está de acuerdo con la compatibilidad y hasta vería bien que los presidentes insulares estuvieran en la Cámara. El PSOE también lo respaldó, aunque lamentó las prisas y formas, pero la gran crítica vino desde Podemos, que concibe esto como una "prebenda" y que apuesta por la dedicación exclusiva.