En mayo de 2015, para sorpresa de algunos y alusiones continuas desde entonces a una nueva era política, más plural y necesitada de mucho diálogo y pactos, el Parlamento canario recuperó la presencia de 6 partidos (PSOE, PP, CC, Podemos, NC y ASG, según los votos). Se alejaba así la posibilidad de una mayoría absoluta (inédita en las Islas, en gran parte, por el sistema electoral) y se duplicaba la representación de fuerzas respecto a los años en que solo hubo tres, las clásicas: CC, PSOE y PP, si bien con AHI como satélite nacionalista. Esta tendencia a la atomización parece que se acentuará dentro de 5 meses, pero, en realidad y aunque parezca extraño, no será novedoso, pues ya hubo legislaturas con la misma o mayor cifra de formaciones.

Todo apunta a que, por la bajada del tope regional del 6 al 4%, Cs entrará sin duda, ya que, en 2015, sacó un 5,84% y 54.375 votos, pero no logró escaño. Por lo mismo, y dado el repentino auge estatal de la ultraderechista Vox, que rozó el 12% en Andalucía el pasado 2 de diciembre, la Cámara puede alcanzar los 8 grupos. Y, sin embargo, no será la legislatura con más partidos, aunque sí recuperará un pluralismo casi olvidado.

De confirmarse esos 8 grupos, se igualaría la cifra de 1987 a 1991 y se estaría uno por debajo del primer mandato, del 83 al 87, cuando hubo 9, algo muy propio de la célebre sopa de siglas de la Transición, por mucho bipartidismo que acabase asentándose a escala nacional, primero entre UCD y PSOE y, luego, entre socialistas y AP o PP.

En esa legislatura de estreno (83-87), gobernó Saavedra (PSOE) tras ganar con 27 diputados de 60 (la mayor cifra de la historia, al que se acercó el también socialista López Aguilar en 2007, con 26). En segundo lugar, con 17 escaños, se quedó la coalición conservadora y liberal de AP-PDP-UL, mientras que el CDS, creado en 1982 por Suárez y con Fernando Fernández de candidato canario (que aún tenía carné de la UGT), obtuvo 6. Ya entonces, Asamblea Majorera (AM), hoy integrante de CC y voz claramente progresista dentro de la formación, consiguió 3, mientras que la coalición Unión del Pueblo Canario-Asamblea Canaria (UPC-AC), que había logrado buenos resultados en las locales de 1979 y generales del 78, entró con 2.

Además, la Agrupación Gomera Independiente (AGI), una especie de antecedente de ASG, pero sin el componente socialista y luego integrante de AIC y CC, obtuvo 2 escaños, mientras que Convergencia Nacionalista Canaria (CCNC) logró un acta, la misma cifra que el Partido Comunista de Canarias-PCE y que la, desde entonces, clásica Agrupación Herreña Independiente (AHI), que a finales de este enero volverá a decidir si repite con CC o va sola.

Ese mandato, pues, que vivió el célebre pacto progresista del 85 al 87 y polémicas como la ley de aguas (Saavedra siempre dice que le costó la reelección), contó con 9 fuerzas, solo reducidas en 1 de 1987 al 91, que es lo que parece que ocurrirá ahora.

Del 87 al 91, y si bien con una antológica moción de confianza que acabó con Fernández, se sucedieron dos gobiernos de centroderecha, con Lorenzo Olarte como presidente tras suceder al líder del CDS, al que no apoyó Hermoso (ATI-AIC) en aquella "confianza" pese a ser su vicepresidente.

Las elecciones las volvió a ganar el PSOE, pero sus 21 diputados le impidieron alcanzar un pacto de izquierdas. Hermoso, que venía de la extinta UCD, aglutinó a varias fuerzas insularistas en las AIC (ATI, API, AGI...) y sumó 11, mientras que el CDS rentabilizó su oposición al pacto progresista del 85 al 87 y subió de 6 a 13, obteniendo la Presidencia hasta la insólita "confianza". AP (que poco después se llamó PP) se quedó en 6, pero el pluralismo del 83 siguió en gran parte con los 2 escaños de Asamblea Canaria-Izquierda Nacionalista Canaria (AC-INC), los otros 2 de Izquierda Canaria Unida (ICU, ambos precedentes de Ican), los 3 de AM y los 2 de AHI, lo que hizo un total de 8 grupos.

De 1991 al 95, con la vuelta de Saavedra a la victoria y la Presidencia hasta la censura del 93, que dejó a Hermoso en el mando, comenzó la condensación, en lo que la creación de CC fue clave. El PSC reforzó su triunfo subiendo a 23 escaños, mientras que las AIC se asentaron, pasando de 11 a 16. El CDS, liderado por Olarte (Fernández se alejó hasta entrar en el PP) bajó a 7; el PP se mantuvo en 6; Ican obtuvo 5, AM logró 2 y AHI, con Juan Padrón, consiguió 1. Hubo, pues, 6 grupos, aunque, en realidad y al crearse CC para las generales del 93 y la censura, Ican, AM, AHI, el CDS y hasta algunos del PP propiciaron la salida del PSC y abrieron la etapa tripartita, con AHI como satélite entrante y saliente de CC.

De 1995 a 1999, CC desbanca al PSOE de la victoria y obtiene 21 escaños. El PP de Bravo de Laguna sube a 18 por su auge nacional; el PSC, liderado entonces por Augusto Brito, baja a 16; la Plataforma Canaria Nacionalista (PCN), con Dimas Martín, obtiene 4 y la AHI repite con 1. De los 9 de 1983, por tanto, la Cámara pasa a 5 grupos.

Esta tendencia a la concentración se acentúa en 1999, cuando CC, con Román Rodríguez (hoy líder de NC), logra su mejor resultado, con 24 escaños. Le sigue el PSOE , de nuevo dirigido por Saavedra, que sube de 16 a 19; el PP baja a 15 y AHI consigue 2. De 5, pues, se pasa a 4 formaciones.

En 2003, vuelve a haber 4 grupos, con CC repitiendo victoria (con AHI dentro), aunque bajando a 23, el PSOE y PP empatando a 17 y la Federación Nacionalista Canaria obteniendo 3. Cuatro años después, en 2007, se reeditan los 4 partidos, aunque con un PSOE triunfador, con 26, pero sin gobernar por el pacto entre CC (17) y PP (15), con otros 2 escaños para AHI. En 2011, gana por primera vez el PP (21) y, sin embargo y en algo habitual en CC, los nacionalistas mantienen la Presidencia tras lograr 20 y pactar con el PSOE (15). Se creó NC, que entró con 3, y AHI obtuvo 1. Cinco grupos que, en 2015, subieron a 6 y que, en mayo próximo, parece que serán 8. Como la vida en muchas cosas, la Cámara regional también es cíclica.

Dos urnas regionales para otra etapa plural

Que el Parlamento pueda tener 8 partidos tras el 26 de mayo no es muy novedoso, pero sí lo será la forma de votar. Por primera vez, y por la reforma electoral incluida en el nuevo Estatuto y promovida por el PSOE, PP, Podemos y NC, con el apoyo externo de Cs e IU y el no de CC y ASG, los isleños elegirán 70 escaños. De ellos, 60 serán los existentes desde 1983, en función del Estatuto del 82 y la célebre triple paridad, pero se añadirá 1 por Fuerteventura porque, hasta ahora, tenía menos diputados que La Palma pese a superarla en población. Además, se estrenará la ya famosa lista regional y esto hará que, casi con total seguridad y dado el dictamen del Consultivo, haya una segunda urna y papeleta y sobre diferenciado para esos 9 representantes. Entre ellos, estarán los candidatos a presidente de CC, PSOE y NC, a la espera de qué decida el PP, si bien todo apunta a que Asier Antona seguirá los pasos de Fernando Clavijo, Ángel V. Torres y Román Rodríguez. Por Podemos, la candidata a presidenta, Noemí Santana, irá, sin embargo, en la lista de Gran Canaria y está por ver quién lidera a Cs y Vox, ambos pendientes de primarias. La bajada del tope regional del 6 al 4% facilita la entrada de Cs y Vox, mientras que la insular, del 30 al 15, abre incógnitas en islas grandes, con ASTF (extensión de ASG) como otra de las grandes dudas.