El Consejo Canario de Formación Profesional (FP), en el que están representadas las áreas de Educación y Empleo del Gobierno regional, así como el Consejo Escolar de Canarias, las organizaciones sindicales y el sector empresarial, aprobó ayer el nuevo Plan de FP para el periodo 2018-2022, con el que se pretende contribuir al desarrollo de un nuevo modelo social, económico y cultural sostenible, adaptado a las singularidades del Archipiélago.

El objetivo principal de este plan es el de capacitar a la población para que adquiera o mejore su adaptabilidad y su espíritu empresarial a través de una FP "atractiva, de calidad y adecuada" al mercado laboral, así como a la carrera personal y profesional, informó el Gobierno en un comunicado.

El documento recoge un nuevo enfoque de la FP con una oferta más modular que busca satisfacer tanto la demanda de formación inicial como la de la población empleada y parada, y más integral, es decir, con la voluntad de implicar a todas las áreas, más allá de Educación y Empleo.

También se centra en la concepción de la FP como una respuesta a las necesidades de formación de la población en todos los sectores y ámbitos. Para la consejera de Educación, Soledad Monzón, se trata de una "herramienta para seguir avanzando en la mejora de la cualificación y las competencias de la población canaria" para poderse "anticipar y responder mejor a la rápida" evolución de las necesidades de mercados de trabajo dinámicos.

La titular de Empleo, Cristina Valido, indicó que se ha intentado "contestar a las demandas más frecuentes del sector empresarial y, sobre todo, con una visión de futuro", ya que el mercado de trabajo "cambia a una velocidad enorme y, por lo tanto, sin formación, las oportunidades del empleo están restringidas a muy pocas actividades".