Tras la aprobación del nuevo Estatuto canario y REF, las reacciones se multiplicaron en Madrid y las Islas. En el Senado, el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, celebró ayer el hecho de que, a su juicio y con este texto, el Archipiélago entra en "la primera liga de las comunidades autónomas". En los pasillos de la Cámara Alta, el líder de CC subrayo que este paso "permitirá que Canarias pueda escribir con su propia letra el futuro de esta tierra".

Clavijo agradeció su papel en este estatuto al portavoz de CC en el Parlamento regional, José Miguel Ruano, a Mariano Rajoy y a Soraya Sáenz de Santamaría, al actual Ejecutivo y a la ministra de Política Territorial y Función Pública, Meritxell Batet, y a los diputados y senadores que han participado.

Por el PP, el presidente autonómico de los conservadores, Asier Antona, remarcó que la tramitación de la reforma estatutaria "se impulsó bajo el Gobierno del PP", lo que permite ahora a Canarias "escribir con letras de oro su futuro"; mientras que el secretario general socialista, Ángel Víctor Torres, se congratuló por el "doble día histórico" para Canarias: en lo político, por la aprobación del Estatuto, y en lo económico, por la del nuevo Régimen Económico y Fiscal. El candidato socialista cree muy importante que, por fin, haya lista electoral regional y agradeció su labor al portavoz del PSOE en el Senado, Ander Gil, quien aplaude el consenso visto ayer "para algo bueno".

El presidente de NC, Román Rodríguez, destacó también el papel del diputado de su partido en el Congreso, Pedro Quevedo, y de la senadora de la formación, María José López Santana, y alabó la entrada en vigor de "un Estatuto de segunda generación con un amplio nivel de competencias".

La portavoz adjunta de Ciudadanos (Cs) en el Congreso Melisa Rodríguez definió como "agridulce" esta jornada. Según indicó, los avances de este Estatuto con respecto al anterior son insuficientes porque se pudo haber trabajado en "un texto más moderno", con justicia y medios de comunicación "independientes", transparencia, reducción de burocracia y mayor "ambición".

Por su parte, Batet cree que el paso de ayer prueba la capacidad de llegar "a amplios consensos", subrayando que todos los estatutos de autonomía "trascienden" de su propio ámbito, afectan a todos los españoles y deben "desarrollar y garantizar" la Constitución española. Según remarcó, este texto "no cuestiona el modelo constitucional", sino que "lo desarrolla y garantiza su efectividad". Asimismo, defendió estas reformas para hacer el modelo más funcional. "Este estatuto -dijo- es una muestra más de la falacia de contraponer la existencia de derechos de cada comunidad y la exigencia de igualdad entre los españoles".