En la jornada de hoy comenzará un ciclo de protestas en el exterior de los centros sanitarios, que se afianzarán como una primera consecuencia del preaviso de huelga registrado por el sindicato mayoritario, Intersindical Canaria, que empezará a ser efectiva a partir del 9 de noviembre con paros parciales cada viernes.

El sindicato, que ayer ofreció una rueda de prensa, ha tomado esta decisión al considerar que "los trabajadores de la sanidad pública están siendo castigados", mientras el "Gobierno de Canarias hace alarde publicitario de recuparación económica".

En este sentido, el sindicato realiza varias reivindicaciones con las que pretende mejorar el estado laboral de los trabajadores sanitarios. Una hoja de ruta por la que se regirán todas estas acciones, incluida una gran manifestación prevista para la segunda quincena de noviembre.

El sindicato solicita la recuperación de la jornada de 35 horas y del número de trabajadores necesarios para mantener los ratios de personal en relación con la población asistida, la devolución a los trabajadores de las horas realizadas de más - que cifraron en unas 88.000 solo en el Hospital Universitario de Canarias (HUC)-, y del 100% de las retribuciones en caso de incapacidad temporal, así como la totalidad del complemento específico de pagas extra, el reconocimiento de la carrera profesional al personal temporal, la estabilización de las ofertas públicas de empleo y la recuperación del poder adquisitivo -que ha sido mermado en términos absolutos en un 20% en relación al IPC- y de otras cuestiones como las ayudas sociales o el plan de pensiones.

Intersindical Canaria realizó un llamamiento "al resto de organizaciones sindicales y sociales, así como al conjunto de los trabajadores", para que también se unan a estas movilizaciones.