La tercera asamblea regional de Sí Se Puede decidió ayer en Santa Cruz de Tenerife propiciar y participar en confluencias de la izquierda del Archipiélago en las elecciones del próximo año, aunque, como ya hiciera en 2015, se reserva la posibilidad de presentarse por separado en los lugares donde no sean posibles esas listas compartidas.

La decisión se tomó por una amplia mayoría de más de las tres cuartas partes de la militancia del partido ecosocialista que asistió a la asamblea. Eso sí, se prefiere que esas confluencias sean con plataformas ciudadanas y "fuerzas políticas de cambio siempre que haya condiciones para ello", según se matiza en un comunicado.

Entre esas fuerzas, Sí Se Puede incluye a Podemos (con la que ya confluyó en 2015 al Parlamento regional y al Cabildo tinerfeño, entre otras instituciones), Izquierda Unida, Equo y otras organizaciones locales o insulares del ámbito de la izquierda alternativa, como Somos o Alternativa Ciudadana 25 de Mayo, de Lanzarote.

La gran incógnita en la provincia oriental, si irían junto a Nueva Canarias (NC), quedó ayer claramente despejada. La asamblea descarta cualquier opción de alcanzar acuerdos preelectorales con la formación que lidera Román Rodríguez y lo mismo con el PSOE canario, si bien matizan que esto no implica que puedan llegar a pactos posteriores en pro de gobiernos progresistas donde la aritmética lo permita.

Según subraya Sí Se Puede, la formación pone fin así a "un proceso de reflexión colectiva que ha durado nueve meses". Desde ahora, se lanzarán a promover las reuniones necesarias con las citadas fuerzas para tratar de alcanzar esos acuerdos, siempre que se respete "la soberanía de cada organización participante en las confluencias, así como el establecimiento de relaciones en un marco de igualdad entre todos los participantes".

Para la formación ecosocialista, que cuenta, por ejemplo, con cuatro ediles en Santa Cruz de Tenerife, lo importante no es solo la coyuntura electoral, sino "constituir y fortalecer un movimiento popular canario de cambio, en el que organizaciones políticas y sociales sumen sus fuerzas y sus capacidades para avanzar hacia la consecución de los objetivos que garantizarán la mejora de las condiciones de vida de los que viven en Canarias".

Una apuesta que contraponen al actual "panorama de corrupción, sufrimiento social y retroceso de derechos y atroces recortes", y con la que anhelan "un nuevo modelo social, cultural, político y económico autocentrado, sostenible, solidario e ilusionante para la ciudadanía canaria".