Medio centenar de contenedores con 1.200 toneladas de gofio llegarán este verano a los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf, en Argelia, gracias a una iniciativa del Cabildo de Gran Canaria financiada por los Presupuestos Generales del Estado de 2018.

El Cabildo ha anunciado hoy en un comunicado que ya ha comenzado a preparar con el Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas el primer envío de gofio La Piña a Tinduf, al que seguirán otros seis de forma gradual hasta septiembre a través del puerto de Orán, en Argelia.

Los objetivos de esta iniciativa son reducir la malnutrición y la anemia en los niños menores de cinco años y mujeres embarazadas, además de la distribución del gofio en las escuelas para fomentar la asistencia de los niños a clase, destaca el Cabildo, que calcula que unas 125.000 personas se beneficiarán de esta partida.

La entidad encargada de la adquisición del gofio y de su envío ha sido la base en Las Palmas de Gran Canaria del Programa Mundial de Alimentos.

Según ha explicado el gerente de la empresa La Piña, Luis Vázquez, el gofio que llegará a los campamentos saharauis está fabricado especialmente para este envío, ya que los saharauis "prefieren el millo molido más grueso y con un tueste más ligero que en Canarias".

Los campamentos de refugiados del Sáhara Occidental se levantaron en Argelia en 1975, bajo los 50 gracos del desierto, sin agua y dependiendo de ayudas internacionales.

En los últimos años, los índices de anemia en menores y mujeres embarazadas han empeorado, por lo que el Programa Mundial de Alimentos ha tenido que reelaborar su actividad de nutrición y centrarse en la lucha contra la anemia, apunta el Cabildo.

Esta corporación insular también colabora en otras acciones para cubrir las necesidades de los refugiados saharauis, como el envío de sillas de ruedas, material escolar y cocinas, así como un molino de viento para la extracción de agua.

Al acto de presentación de esta primera partida de gofio para los campamentos de Tinduf han asistido el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, y su consejero de Cooperación Internacional, Carmelo Ramírez (ambos de NC), así como su compañero de partido el diputado nacional Pedro Quevedo, que negoció la partida presupuestaria; el director en funciones del Programa Mundial de Alimentos en Las Palmas, Enrique Pulido; y al delegado del Frente Polisario en Canarias, Hamdi Mansur.