Los pediatras y los docentes consideran que no se puede luchar contra el crecimiento de los eSports (deportes electrónicos), pero critican que se consideren deporte.

En esta línea se manifestó ayer Pedro Crespo, presidente de Anpe Canarias, quien afirmó a Radio El Día que "no podemos huir de esta realidad", ya que forma parte de las inquietudes del alumnado. No obstante, hizo hincapié en que, para añadirlos al currículo escolar, debería enfocarse como una competencia digital, pero nunca como deporte.

Asimismo, Agustín Graffigna, presidente de la Asociación Canaria de Pediatría de Atención Primaria, quien también fue entrevistado en Radio El Día, afirmó que la intención del colectivo no es conseguir que se prohíban los eSports, ya que es "una situación imparable", pero criticó que desde las instituciones públicas se fomenten y se diga que "son buenos".

En esta línea, Pedro Crespo afirmó que no comparte "en absoluto" que sea una prioridad para los alumnos. Mientras, Graffigna defendió que los niños necesitan "un ejercicio activo al aire libre" y recordó que Canarias tiene uno de los niveles más altos de obesidad infantil.

"Bastante desarmados están los padres y nosotros los especialistas, para que desde las instituciones públicas se fomente esto", dijo el pediatra, haciendo alusión a la propuesta de la Consejería de Educación de llevar a cabo una liga de eSports en los centros educativos. Agustín Graffigna alegó que los pediatras, tras haber denunciado la situación el pasado sábado, no han recibido respuesta de la Consejería ni el Gobierno, aunque sí de colectivos defensores de los eSports quienes les han pedido una reunión.

"Que se pongan cotos"

El pediatra de Atención Primaria Agustín Graffigna insistió en que no se debe prohíbir el ocio con videojuegos, aunque remarcó que "hay que ponerle cotos". "El niño no debe pasar más de 4 o 5 horas a la semana de pantalla, ya sea en la televisión o jugando a videojuegos", explica Graffigna. En esta línea, argumentó que si se fomenta desde otros ámbitos que el niño juegue más y que eso es bueno (en concreto las instituciones), "estamos hablando idiomas diferentes". El pediatra también hizo alusión a la tendencia a la adicción de muchos niños y adolescentes a los videojuegos, que puede llegar, según la OMS, al 30%.