El Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas (PMA) agradeció ayer a España la ayuda que le ha prestado para poder proporcionar víveres desde su base de Las Palmas de Gran Canaria a 2,4 millones de personas en situación de emergencias desde 2013.

La mayor agencia humanitaria de la ONU llegó a en 2012 a un acuerdo con el Gobierno de España para instalar un almacén de alimentos en el puerto de Las Palmas, desde el que atender las hambrunas que se producen fundamentalmente en países de África.

El director de la base del PMA en Canarias, Pablo Yuste, relató ayer al ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, que las operaciones que se realizan desde el puerto de Las Palmas se han convertido ya en estratégica para esta agencia de Naciones Unidas.

"En estos años hemos movido 420.000 toneladas. Hemos podido alimentar, gracias al apoyo español, a 2,4 millones de personas. Esa cifra lo dice todo. Hablamos de personas en situación de emergencia y esta base nos ha permitido atenderlas de una forma más eficiente", relató.

Yuste mostró en la mañana de ayer a Dastis el almacén de alimentos de Las Palmas de Gran Canaria, desde el que cada año se envían ya de 80.000 a 100.000 toneladas de alimentos a países con crisis humanitarias.

La base de Canarias se ha demostrado también útil para reaccionar ante emergencias en América Latina, donde el PMA carece de un depósito de alimentos, pero su vocación es, fundamentalmente, africana.

De hecho, los alimentos que salen desde los almacenes del PMA en el puerto de Las Palmas suponen en este momento el 30% de todos los que la comunidad internacional envía a África Occidental.

Además, coincidiendo con la apertura de su base en Canarias, el PMA puso en marcha un nuevo sistema de trabajo: ya no compra alimentos cuando surge una emergencia, sino que los va adquiriendo durante todo el año al precio que le conviene y luego los moviliza allí donde se necesitan.

Pablo Yuste también aprovechó la presencia del ministro de Asuntos Exteriores para agradecer a España, en particular, lo que hizo por el PMA (y por África) en la crisis del ébola. En ese momento, recordó Yuste, con los principales puertos de África cerrados a cualquier barco que procediera de países donde había focos de infección, España permitió al PMA distribuir desde el puerto de Las Palmas alimentos a la población que sufría una consecuencia poco conocida del ébola: el hambre, derivada del abandono de los campos y de colapso del comercio.

Entonces, bajo estrictos protocolos de seguridad, en los que los marineros de los barcos implicados no pisaban tierra, el PMA envió a esos países toneladas de alimentos desde Las Palmas. "Nunca podremos agradecerlo lo suficiente", enfatizó Pablo Yuste.