Los hoteleros de la provincia llevan más de un año defendiendo la posibilidad de prejubilar a los 58 años a las camareras de piso con el fin de dar una "salida honrosa" a las trabajadoras de mayor edad y que hayan sufrido un mayor desgaste físico. La patronal del sector, Ashotel, y representantes de Kellys Unión Tenerife -asociación que agrupa a las camareras de la Isla- se reunieron el pasado lunes en un encuentro en el que el colectivo profesional expuso sus reivindicaciones -sobre todo, lo que consideran unas cargas de trabajo excesivas- y los dirigentes empresariales les entregaron su propuesta de prejubilación, diseñada de acuerdo con el Cabildo.

La medida propuesta por la patronal hotelera y extrahotelera se encuentra con un problema, el del alto coste que supone para las empresas asumirla, en especial porque las plantillas más envejecidas son las de los destinos más maduros y menos rentables. Para salvar este obstáculo, Ashotel ha sugerido la posibilidad de solicitar financiación pública -que complementaría la privada- bajo el "paraguas" de los consorcios urbanísticos de rehabilitación, un instrumento con el que cuentan cuatro zonas del país -Puerto de la Cruz, San Bartolomé de Tirajana, la Costa del Sol y Playa de Palma- y que implica a todos los niveles de la administración en su mejora.

"Se trata de destinos con similitudes y que no solo están obsoletos desde el punto de vista físico, sino que tienen las plantillas más antiguas", explicó ayer a este periódico el gerente de la asociación, Juan Pablo González. El "modelo" que sugiere Ashotel -un proyecto piloto- consiste en seleccionar "una serie de hoteles representativos" en esos municipios y articular un sistema de cofinanciación para el personal de la misma manera que se aportan fondos públicos para espacios e infraestructuras.

González admite que la Seguridad Social pone reparos a financiar este tipo de actuaciones -"habrá que mirarlo no con lupa, sino con microscopio", advierte-, pero también recalca que se trata de encontrar remedio a "un problema social". "Ponemos la solución encima de la mesa", apunta. La Consejería canaria de Empleo se ha comprometido a plantear la propuesta al Estado.

Ashotel calcula que el coste de cada prejubilación para las empresas rondaría los 20.000 euros -indemnización y pago de la Seguridad Social durante dos años-, lo que elevaría la cantidad total por encima de los 200.000 si se utiliza la fórmula del expediente de regulación de empleo.

Paralelamente, las administraciones canarias han avanzado la posibilidad de crear "alguna línea de financiación" para sustituir al personal que se prejubile con perfiles "más jóvenes", una medida que iría vinculada a contratos indefinidos y a jornada completa.

Servicio compartido para la prevención de riesgos

La carga de trabajo que soportan las camareras de piso es la principal demanda del colectivo. El presidente de Ashotel trasladó el lunes a Kellys Unión Tenerife que cada establecimiento fija esta carga en función de estudios ergonómicos y opinó que no tiene sentido establecer por norma un número de habitaciones diarias cuando estas son muy distintas, indica la patronal en un comunicado. No obstante, la asociación estudia crear un servicio mancomunado de prevención de riesgos laborales para los hoteles y así evitar que se recurra a empresas externas y no especializadas en el sector.