En una de las comisiones presupuestarias con más momentos tensos o sarcásticos, primero porque G. Matos (PSC) le llamó "el segundo patito feo" del Gobierno tras Pedro Ortega y porque Esther González le reprochó que hablase de "mala leche" sobre su intervención, el consejero de Justicia, José M. Barragán, dio varias noticias de nivel al final de su comparecencia en la tarde de ayer. La principal, que su presupuesto para 2018 incluye 900.000 euros para los proyectos de nuevos juzgados en Fuerteventura y otros 200.000 para la polémica ciudad judicial de Tenerife, pero solo si esta se edifica en El Sobradillo. Ante el murmullo general, Barragán explicó justo al final de su intervención que esto se produce porque el Ayuntamiento de Santa Cruz le ha pedido 24 meses para saber si puede adaptar el espacio y los obstáculos para hacerla en Cabo Llanos, plazo que Barragán incluso amplió a 36 meses si, así, lo aprueba el subsector.

Además, y con 4,4 millones, anunció que en 2018 se incorporarán 5 nuevos juzgados (2 en Tenerife, 2 en Fuerteventura y uno en Gran Canaria). Sin embargo, el aumento del 6% en su área no convenció a la izquierda, sobre todo por la escasa subida para Igualdad y el drama de la violencia machista.