El servicio de Traumatología y Ortopedia del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria, en Tenerife, ha introducido en España una técnica quirúrgica con la que tratar el dolor en rodilla provocado por lesiones óseas subcondrales.

Se trata de una infiltración ósea guiada por imagen que permite la inyección de un material novedoso que actúa como sustituto óseo capaz de solidificar las microfracturas en el hueso, responsables de causar dolor en el paciente, según ha informado el Hospital Universitario de La Candelaria en un comunicado.

Este procedimiento se configura como un tratamiento alternativo en pacientes seleccionados a los que otras opciones terapéuticas como las infiltraciones biológicas o las artroscopias no han dado una respuesta óptima para abordar el dolor articular en la rodilla.

El primer paciente operado en Canarias con este procedimiento fue intervenido el pasado mayo y evoluciona favorablemente, con seguimiento posterior por parte de los especialistas del servicio de Traumatología y de Anestesiología, quienes han realizado un control del dolor en este paciente.

Las últimas investigaciones, han indicado en la nota, han revelado que el dolor se origina por el movimiento que producen las microfracturas en el interior de la estructura del hueso subcondral en la rodilla, hasta ahora solo perceptibles a través de una resonancia magnética.

Esta técnica, denominada subcondroplastia, consiste en realizar una infiltración ósea guiada por radiología, donde una broca llega hasta la lesión en el hueso y una vez localizado el área a tratar, se inyecta un material, más fluido que otro tipo de inyectables, que se solidifica una vez entra en contacto con el edema.

Posteriormente, los traumatólogos realizan en el paciente una artroscopia para comprobar que el procedimiento se ha efectuado correctamente y que no ha existido riesgo de fuga en el resto de la articulación.

El objetivo, según el comunicado, es mejorar la calidad del vida del paciente con dolor de rodilla que no ha podido solucionarse con opciones terapéuticas anteriores.

Estas personas, ha asegurado el traumatólogo Ramón Moreno, tienen importantes problemas de movilidad y llevan a sus espaldas fracasos terapéuticos que solo podrían solucionarse con una prótesis de rodilla.