Doscientos docentes prestarán apoyo en centros de zonas desfavorecidas a partir del próximo curso. La medida se incluye dentro de un nuevo programa, el Plan Impulsa, y está enfocada a mejorar las habilidades en lectura, escritura y matemáticas de niños de tres a siete años que se encuentran en una situación social más desfavorecida.

La consejera del área, Soledad Monzón, explicó ayer que un total de 225 centros se beneficiarán de esta iniciativa, surgida tras conocer las recomendaciones de la Agencia Canaria de Calidad Universitaria y Evaluación Educativa a raíz de las primeras evaluaciones de diagnóstico elaboradas el curso pasado. Una de las conclusiones de estas pruebas fue que los estudiantes de centros con el Índice Socioeconómico y Cultural (ISEC) más reducido presentan un nivel de competencias más bajo que el resto.

Este indicador recoge información sobre aspectos como el número de libros que hay en el hogar, el nivel formativo de los padres o si están desempleados. Cuanto más bajo es el resultado, más posibilidades hay de fracaso o malos resultados. Para compensar esta situación, la Consejería ha decidido implementar esta medida, que estos días está siendo presentada a los directores de los centros de las distintas islas.

"La mejor política educativa es una buena política social", expuso la consejera, que defendió la necesidad de impulsar distintas actuaciones sociales si se quiere cambiar los resultados académicos.

El plan fue anunciado ayer en el marco de la presentación del libro "Empleo y formación en Canarias. Propuestas estratégicas y claves de futuro".

El documento, elaborado por un grupo de expertos de la Universidad de La Laguna (ULL), incluye un diagnóstico de la situación y plantea una serie de propuestas para adecuar la compleja relación entre la educación y el mercado laboral.

Reflexión académica para cambiar la realidad

José Luis Rivero Ceballos, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de La Laguna y coordinador del libro "Empleo y Formación en Canarias", presentado ayer, presentó el documento como una reflexión académica que ayude a la toma de decisiones. El libro es resultado de un foro debate sobre este tema celebrado en el marco de las sesiones "ULL Opina", que tuvieron lugar el pasado mes de noviembre en la Facultad de Economía, Empresa y Turismo de la Universidad de La Laguna. En el trabajo participan también los profesores Carlos Legna, José Saturnino Martínez, Juan Manuel Cabrera Sánchez y Manuel González de la Rosa.

Mejorar la transición

El libro, que en breve estará disponible en la web de la institución académica, da cuenta de las tendencias y estrategias en formación y empleo, abunda en estrategias de desarrollo y ocupaciones, dedica un apartado al desarrollo económico de Canarias y el fracaso escolar, y analiza la formación para el empleo y el mercado de trabajo, entre otros aspectos. Tanto el rector de la ULL, Antonio Martinón, como la consejera de Empleo, Cristina Valido, aplaudieron medidas que la Administración y la Universidad están implementando de manera conjunta para mejorar la inserción laboral. Ejemplo de ello es el programa Cataliza, que ya está en su tercera edición, y que tiene una tasa de inserción del 60%. Es decir, seis de cada diez titulados que participan en el programa acaban siendo contratados por las empresas en las que han hecho prácticas.