El Círculo de Empresarios de Gran Canaria ha sugerido hoy al Gobierno canario que, si busca conseguir recursos para financiar sus políticas, haga "adelgazar a la administración", en lugar de establecer nuevos impuestos que "sustraen" al ciudadano su capacidad adquisitiva.

Este grupo de grandes empresarios de Gran Canaria responde de esta manera a las declaraciones de la consejera de Hacienda, Rosa Dávila (CC), que esta semana ha reconocido que su Gobierno está valorando crear un nuevo impuesto que grave las bebidas azucaradas y la bollería industrial, para ayudar a reducir las tasas de obesidad.

"La clase política, en lugar de devolver el sacrificio hecho por los ciudadanos a lo largo de los años de crisis, pretende seguir imponiendo tasas tanto a empresas como a productos para engrosar a un más sus cuentas públicas. Esto es algo que no podemos permitir", sentencia esta organización patronal, en un comunicado.

El Círculo de Empresarios de Gran Canaria opina que el posible impuesto a las bebidas azucaradas "se enmascara" hablando del problema de la obesidad, lo mismo que la nueva tasa a los carburantes se presentó como "céntimo verde" para financiar políticas de biodiversidad o de recuperación de espacios degradados.

Sin embargo, a su juicio, se trata en ambos casos de "atracos al bolsillo" del ciudadano, que solo merman su capacidad adquisitiva.

"Los ciudadanos y las empresa de Canarias ya soportan una excesiva presión fiscal desde 2012, cuando el entonces presidente, Paulino Rivero, impuso una subida del tipo general del IGIC del 5 % al 7 %", defiende este colectivo de empresarios.

El Círculo sostiene que, con iniciativas como la de crear nuevos impuestos, el Gobierno de Canarias "puede perjudicar más que ayudar a la recuperación" económica del archipiélago.