El Partido Popular de Canarias constituyó ayer una comisión interna para estudiar la "mejor fórmula de propuesta" para la reforma electoral y destacó que su intención es alcanzar un principio de acuerdo en el Parlamento regional sobre la reforma antes de que finalice el periodo de sesiones.

El presidente del PP de Canarias, Asier Antona, indicó en una rueda de prensa que su formación ha decidido crear esta mesa interna cuando está "a punto de terminar" su trabajo la comisión de estudio del Parlamento autonómico, en la que han comparecido expertos, representantes de grupos extraparlamentarios y exdiputados.

La comisión está formada por el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Juan José Cardona, el eurodiputado Gabriel Mato, el diputado nacional Pablo Matos, el portavoz del PP en el Cabildo Gran Canaria, Felipe Afonso El Jaber, el diputado del Parlamento de Canarias Miguel Jorge Blanco y el portavoz en el Cabildo de La Palma Carlos Cabrero.

Esta mesa cuenta con la secretaria general del Partido Popular en el Archipiélago, Australia Navarro como coordinadora y, al menos en la primera sesión, que tuvo lugar ayer, está presidida por Asier Antona.

Antona reafirmó la posición contraria de su partido respecto a la vía estatuaria de la reforma electoral, es decir, que sea el Congreso de los Diputados el que defina el sistema electoral a través de una disposición transitoria en la reforma del Estatuto de Autonomía de Canarias.

Para el presidente del PP, que el Congreso de los Diputados reforme el sistema electoral supondría "un gran fracaso" para la política en Canarias, ya que se trata de una norma que afecta a la Comunidad Autónoma.

Antona añadió que considera fundamental que los grupos políticos en el Parlamento de Canarias se pongan de acuerdo en la mejor forma de reformar el sistema electoral que rige en los comicios autonómicos.

El dirigente popular resaltó los "principios básicos" que defenderá el PP ante la reforma electoral, y que son, en primer lugar, que no sea "traumática", es decir, que todos se sientan "cómodos" con las modificaciones.

En segundo lugar, afirmó que el PP no quiere que ninguna isla pierda peso en su representación, de manera que mantenga como mínimo los diputados con los que cuenta ahora.

En tercer lugar, el PP quiere que esta reforma se aplique en las próximas elecciones autonómicas, por lo que debe estar aprobada antes de 2019.

La bajada de los topes electorales en el ámbito autonómico e insular es otra de las premisas que defiende el PP, que plantea mejorar la proporcionalidad en la representación poblacional.

Por último, opinó que debe haber "sinergia" entre lo que se avanza y concluye en la comisión de estudio del Parlamento de Canarias y la reforma del Estatuto de Autonomía, de manera que ambas vías sean compatibles y avancen sincronizadas, por lo que no puede "haber un divorcio entre los dos caminos".