Dos semanas después de tomar posesión como Jefe de Producción de la Radio Televisión Canaria, Rubén Fontes presentó a su socio Raúl Rivero al resto de directivos de las productoras de la provincia de Las Palmas que solían trabajar con el ente público.

Fontes, mano derecha de Guillermo García durante su etapa al frente de la Radio Televisión Canaria (RTVC), lo presentó en la reunión como administrador de Audiovisual 7 Mares SL.

Las investigaciones llevadas a cabo por la Policía confirman que Fontes, Raúl Rivero y Ángel Bartolomé Cardenes - este último vendió su parte a Rivero de forma acelerada al final de 2015- como los accionistas de esta productora.

De hecho, el informe de la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Delitos Económicos asegura que la participación de Fontes en esta empresa estaba camuflada en el 66% que poseía Raúl Rivero, confirmando también que el día a día de la sociedad tenía que ver con las decisiones del ex jefe de Producción de RTVC.

Lo curioso es que, a pesar de la carencia de medios de esta empresa, por ejemplo, no disponía de Unidad Móvil, Audiovisual 7 Mares SL, en el periodo comprendido entre el 1 de enero de 2008 al 31 de diciembre de 2014, firmó 249 facturas y 5 contratos con la Televisión Canaria, por un valor total de 2.673.636 euros, superando algunas de ellas los 50.000 euros.

El proceso judicial que investiga la gestión de Guillermo "Willy" García como director de la RTVC -desde diciembre de 2007 a mayo de 2015- se inicia por las investigaciones de la Policía en 2015 por los contratos adjudicados a Paco Padrón, propietario de la productora Amanecer Latino que obtuvo 2.300.000 euros.

En esta causa, conocida como operación Gloria, además de a Paco Padrón y a Rubén Fontes, exjefe de Producción de RTVC y exsecretario de Organización de Coalición Canaria en Gran Canaria, se investiga también a Santiago Falcón, propietario de Doble Diez Comunicación SL, que consiguió del ente público casi 9 millones de euros, entre 2008 y 2011, de los más de 12 millones que se fiscalizan en este procedimiento.

Tras los autos rubricados por la magistrada del Juzgado de Instrucción Nº 4 de Santa Cruz de Tenerife que acordaban levantar el secreto de las actuaciones, las sombras sobre la presunta gestión fraudulenta de Guillermo García, "beneficiando" a sus empresarios afines, bajo la protección de quién le designó en el cargo, el expresidente Paulino Rivero, comienzan a ver la luz.