Lucas Fernández, propietario de hasta siete empresas agrupadas en el holding Grupo Plató del Atlántico, suscribió más de 6.500.000 euros en contratos con la Televisión Canaria durante la etapa en la que la empresa pública estaba gestionada por Guillermo García, que desempeñaba el cargo por decisión del entonces presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero.

En la etapa previa, con su empresa Plató del Atlántico plenamente operativa, Fernández únicamente había logrado facturarle directamente a la televisión autonómica 156.000 euros, por la realización de trece programas de la segunda serie de "La Caverna", que presentaba Carmelo Rivero, actual director del periódico que hoy preside.

El Grupo de Delincuencia Económica de la Policía Judicial de Santa Cruz de Tenerife investiga si los contratos suscritos por las empresas de Fernández en la etapa de Guillermo García podrían haberse producido con sobreprecio. García está actualmente procesado bajo sospecha de prácticas similares con la empresa Canal 7 del Atlántico, SL, propiedad de Francisco Padrón, antiguo empleador del propio García y de Fernández.

Los programas contratados por Radio Televisión Canaria a Lucas Fernández se agrupan en varias series, como "El expreso de Mediodía", contratado en cuatro ocasiones por un total de más de dos millones de euros, pagándose por entregas de la misma duración cantidades que oscilaban entre los 8.708,69 y los 5.780 euros.

También se vendieron dos temporadas de "Canarios por el Mundo", abonándose por la primera, con 34 capítulos, un total de 935.000 euros, y por la segunda, de 25 capítulos, un total de 487.500 euros. Se contrataron igualmente cinco temporadas de "Parranda Canaria", a 20.000 euros por entrega, con un total de 2.240.000 euros.

Según un informe interno de producción, al que ha tenido acceso EL DÍA, las series mencionadas eran siempre más caras que otras de similares características encargadas a otras productoras por la cadena, y tenían peores resultados de audiencia.

Además, en ningún caso se aportó en las ofertas el beneficio industrial previsto, tal y como hacen el resto de las productoras que contratan con Radio Televisión Canaria y es preceptivo en los sistemas de contratación de la televisión pública.

Uno de los datos más llamativos de esta serie de encargos en cadena es que la víspera del día de los Reyes Magos del pasado año, el 5 de enero de 2015, Fernández alcanzó un acuerdo que le reportó de golpe hasta 812.500 euros por la realización de tres series: "Parranda Canaria", "Abriendo Puertas" y "Venus a la Vista".

Los "regalos de Reyes" de Willy. Esa fecha, sorprendente para la firma de contratos, el día previo a la festividad de Reyes, se repite también en los contratos en su día realizados a Francisco Padrón, lo que dio lugar a que la gente de la televisión canaria que conocía esos acuerdos, se refirieran jocosamente a los mismos como "los regalos de reyes de Willy a sus amigos".

Pero esta no es la única fecha afortunada para el actual propietario del Diario de Avisos, rotativo en el que también escribe el periodista Andrés Chaves. Este dirigió y presentó uno de los programas, "Venus a la Vista". El 20 de marzo de 2015 se firmaron a la vez otros dos contratos por la emisión de varios capítulos de "Abriendo Puertas" y "Parranda Canaria", que suponían un total de 487.000 euros.

La constante en estos encargos es que siempre se trata de adaptaciones de series que han tenido éxito previamente en el ámbito nacional o incluso regional. Alguno de los encargos se realizaron con muy pocas fechas de diferencia con los anteriores, y por lo tanto antes de que se emitieran los programas que se contrataron primero, es decir, antes de conocer los datos de audiencia, que -en todos los casos- fueron bastante bajos.

Por ejemplo, en cuanto a "Parranda Canaria", un programa con grandes costes de producción, su última temporada no llegó a alcanzar siquiera una cuota media de temporada del cinco por ciento, por debajo de la de la cadena, y con apenas 31.000 espectadores en total.

El programa presentado por Andrés Chaves, "Venus a la Vista", hundió sus cifras hasta el 2,4 por ciento de share, con solo 13.000 espectadores de media, lo que en la cadena se consideró un auténtico fracaso para un programa con un coste de 400 euros por minuto de emisión. Las redifusiones fueron aún peor, alcanzando la última solo dos mil espectadores de media.

El programa de Andrés Chaves. Ese contrato fue uno de los más sustanciosos firmados por Lucas Fernández con la televisión canaria, no tanto por la cuantía total para la edición de los trece capítulos de la serie titulada "Venus a la Vista", sino porque el coste real de producción estaba muy por debajo de lo ofertado. Se trataba de una serie de entrevistas que el periodista Andrés Chaves iba a realizar a relevantes mujeres de las Islas, como las cantantes Olga Cerpa o Rosana Arbelo, la periodista Cristina García Ramos, la diputada nacional Ana Oramas, la directora y actriz de cine Antonia San Juan o la modelo Ariadne Artiles, entre otras.

El contrato se materializó por un total de 257.400 euros repartidos entre trece programas cuyo coste unitario ascendía a 19.800 euros, 400 euros por minuto de emisión. Según el presupuesto presentado, Chaves cobró en concepto de director y presentador 15.600 euros, aunque el periodista no declaró nunca ingresos, por lo que ha sido investigado por Hacienda.

A pesar de ser presentado como un programa de factura original, Fernández optó por adaptar a las Islas un formato que ya había sido probado con cierto éxito en varias cadenas nacionales.

Siguiendo una técnica tradicional en la preparación de programas de entrevistas "enlatadas", las grabaciones se encadenaron, realizando varias por jornada, para abaratar aún más los costes.

Reuniones con Ángela Mena

El 5 de enero de 2015, Guillermo García firmó otro acuerdo con Lucas Fernández para la contratación de trece capítulos de "Abriendo Puertas", un programa cuyo contenido consistía en dar a conocer el interior de los principales monumentos de las Islas de la mano del presentador Carlos Castilla y la colaboración de periodistas, historiadores o arquitectos. La serie se contrató por un total de 295.100 euros, lo que suponía 22.700 por programa. Dos meses más tarde la televisión canaria, dirigida ya en funciones por García, acordó con Report Line, SL, la contratación de diez nuevas ediciones de esta misma serie con un presupuesto total de 227.000, idéntico coste que en la ocasión anterior.

Los contratos suscritos por Guillermo García con Lucas Fernández nunca fueron sometidos a la aprobación del Consejo de Administración de la Televisión Canaria, aunque sí eran conocidos por el entonces presidente del Gobierno, Paulino Rivero. La esposa de Rivero -Ángela Mena- amiga personal de Guillermo García, solía acompañarle en algunas de sus comparecencias públicas en actos y presentaciones. Según información que maneja la Unidad de Delincuencia Económica, Mena se habría reunido al menos en tres ocasiones con Lucas Fernández en dos restaurantes de la capital, durante las semanas previas a la firma de los últimos contratos.