El consejero de Justicia y Presidencia, el socialista Aarón Afonso, dejó claro ayer a EL DÍA que el deterioro de la renegociación del pacto con CC hasta un punto de casi no retorno se debe, a su juicio, a la dirección nacionalista en Tenerife, que preside justamente el presidente de Canarias, Fernando Clavijo. Aunque no quiso dar nombres, ni el de Clavijo, Rosa Dávila, Carlos Alonso o Francisco Linares, el que ha sido uno de los negociadores socialistas en estas semanas no alberga dudas de que la "falta de avances" se debe claramente a las reticencias de lo que, hasta 1993, fue ATI, fuerza que el PSOE cree que ha vuelto a tomar mucho peso con Clavijo.

Afonso se muestra tan pesimista con la reconducción del pacto que apenas le da un 20% de posibilidades de que tenga continuidad. Según explica, tanto José Miguel Ruano como José Miguel Barragán, los negociadores de CC, les han detallado en las 4 reuniones que han tenido las dificultades para revertir situaciones como el Puerto o Arico. No obstante, el PSC cree que ha pasado ya casi un año y medio y que, si no una censura formal antes del próximo lunes, sí es el momento de que CC dé garantías reales de que quiere propiciar un alcalde socialista en el Puerto tras una censura a Lope Afonso (PP) y un acuerdo con CC local, así como un cogobierno en Arico, para lo que se necesita la dimisión de la alcaldesa, Elena Fumero (CC).

A su juicio, el problema no radica solo en estos incumplimientos, sino en que la mayor coordinación en el Gobierno regional a la que se compromete CC es totalmente insuficiente si, al mismo tiempo, y después de las críticas a Sanidad o un cierre anticipado del presupuesto que el PSOE no compartía, no se garantizan más partidas en áreas básicas: Sanidad, Servicios Sociales o Educación. Para ello, el PSC reclama un alto porcentaje del aumento presupuestario que se prevé, pero no aprecia excesiva predisposición por parte de su socio.

Afonso cree que CC trata de intoxicar y aplacar a sus críticos con el PP "filtrando" censuras "falsas" entre PSC y los populares y recalca que, tras el próximo lunes y si no hay novedades antes, él y Francisco Hernández Spínola elevarán a la ejecutiva federal los resultados de una renegociación, en su opinión, totalmente insatisfactoria.

En una línea similar se mostró ayer el portavoz parlamentario del PSC, Iñaki Lavandera, que negó movimientos del PSOE para censurar a Clavijo junto al PP y NC. Según recalcó, si alguien se ha acercado al PP en estas últimas semanas ha sido CC, con su acuerdo sobre la TV Canaria o las reuniones del presidente con Asier Antona. Unas citas que, según Afonso, fueron el pasado jueves en una cena y en Presidencia al principio de esta semana.

El dilema: CC no quiere echar al PSC, ni este irse

Aunque parece que el pacto tiene las horas contadas porque, como dice Román Rodríguez, ya no es cuestión de provocaciones, incumplimientos, programas o discrepancias, sino de relaciones personales irreconciliables por pérdida total de confianza, lo cierto es que aún hay socialistas y miembros de CC que no se creen esa ruptura. En tal caso, no se creen que una salida o expulsión de los consejeros del PSOE se repita en otras administraciones. Es más, tanto en CC como en el PSC hay quien da por seguro que, en La Palma, Fuerteventura, Lanzarote y muchos consistorios, el pacto continuará. Sea como sea, lo cierto es que, desde hace semanas, se da un dilema muy paradójico: por un lado, CC no quiere echar al PSC para no quedar como la que creó la inestabilidad definitiva hasta que haya un pacto alternativo o apoyos suficientes (con PP y ASG, se supone); por otro, el PSOE tampoco quiere irse, sino que sean los nacionalistas los que los expulsen y no puedan recurrir al victimismo. Hasta ahora, y frente a rumores e intoxicaciones, Clavijo siempre ha desligado el Gobierno del pacto entre partidos, resaltando los logros de la gestión y el buen ambiente interno, pero no son pocos los que recuerdan su fuerte carácter y que no descartan que, para tomar la iniciativa, corte por lo sano y firme las destituciones de repente.