El juez Salvador Alba denunció ayer ante el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) que la grabación que ha servido de base para acusarle de fabricar pruebas contra Victoria Rosell ha sido manipulada.

El TSJC decidió hace unas semanas abrir un procedimiento contra Alba para investigar si se puso de acuerdo con un imputado en una causa cuya instrucción comenzó la juez Rosell, el empresario Miguel Ángel Ramírez, para que este declarara cuestiones que podían perjudicarla.

Alba sustituyó a Rosell en su juzgado durante los meses en que esta ejerció como diputada de Podemos y se encargó de emitir el informe sobre el estado de la causa abierta a Ramírez por delitos fiscales y contra la Seguridad Social que sirvió de base para que el Tribunal Supremo admitiera una querella del exministro José Manuel Soria.

Soria deberá pagar una fianza de 12.000 euros para seguir con su querella contra Rosell

En esa querella, cuya instrucción ahora corresponde también al TSJC, Soria acusa a Rosell de prevaricación, retardo malicioso de la instrucción y cohecho, porque considera que ralentizó la causa o no tomó determinadas decisiones influida por intereses personales: los negocios que su pareja, el periodista Carlos Sosa, mantenía con Miguel Ángel Ramírez.

El informe que Alba elevó al Supremo contenía una declaración prestada ante él por Ramírez en la que este reconocía que había financiado durante años negocios periodísticos dirigidos por Carlos Sosa. Pero en cuanto Alba abandonó el juzgado, Ramírez proporcionó a su nueva titular la grabación en la que supuestamente este le dice lo que tiene que manifestar para perjudicar a Rosell a cambio de favorecer una posible nulidad de su procedimiento. Ahora, el TSJC exige una fianza de 12.000 euros a Soria si quiere continuar con la querella.