Uno de los principales tesoros de la naturaleza que posee la isla de La Gomera es el guarapo, que se obtiene de la savia de la palmera canaria y que destaca por sus virtudes alimenticias y medicinales. La obtención del guarapo es una práctica que se lleva realizando en Canarias hace 500 años, llegando hasta la actualidad, por lo que está garantizada la continuidad de la tradición.

El presidente del Cabildo, Casimiro Curbelo, destacó que para beneficio de dicho producto "hemos aprobado un reglamento para regular las actividades de su extracción y los cauces para obtener el carnet que permita realizar estas labores, así como el contar con la Casa de la Miel de Palma en Alojera e incluir en las subvenciones de este año a la agricultura por primera vez el guarapo".

El guarapo sigue un proceso tradicional que consiste en obtener la savia de la palmera y luego ponerla en un recipiente al fuego, pero lentamente y constante durante varias horas hasta alcanzar las cualidades organolépticas que le caracterizan. Como dato orientativo y dependiendo de la calidad del guarapo y de la zona, para obtener un litro de guarapo o savia se necesitan ocho litros de savia cruda.

En cuanto a sus cualidades alimenticias, esta miel de palma tiene un porcentaje equilibrado de calorías, y un alto porcentaje de oligoelementos básicos, disponiendo de un grado elevado de cobre, hierro, fósforo, magnesio, potasio, sodio y zinc, elementos todos ellos claves para nuestro organismo.

Esto hace que la miel de palma sea un complemento dietético ideal para deportistas y que sea muy utilizada en la alimentación infantil. Se utiliza especialmente en los postres como la leche asada, las tortas de cuajada o los plátanos. Forma una combinación ideal con el queso fresco, la leche cuajada, los bollos, las natillas blancas, el yogur y el frangollo. Utilizando la savia como elemento básico se confeccionan los alféreces (típico turrón gomero) y el flan de miel. Es también muy común su utilización como acompañamiento en los desayunos y meriendas junto con una tostada de buen pan y mantequilla. En los últimos años con la introducción de las nuevas líneas de cocina de fusión y creativas se introduce como ingrediente de alta calidad.

Es un producto que posee además efectos refrescantes y se suele utilizar como reconstituyente y limpieza del organismo. Posee buenas cualidades para los malestares intestinales.

Son conocidas sus propiedades como regulador de la orina y como medio de evitar su infección.

También tiene otros usos como su aplicación en las erupciones e infecciones bucales.

Está especialmente indicado en fatigas musculares, las oligurias, las obesidades por retención de agua, el reumatismo crónico, la poliartritis crónica evolutiva y la artrosis consecutiva.

Es recomendable también en el caso de afecciones pulmonares.

Curiosamente, muchas de estas características coinciden con los usos medicinales tradicionales del guarapo en La Gomera. Se emplea en las enfermedades de garganta y catarros, haciendo gárgaras o tomándola directamente.

El guarapo ha sido citado a lo largos de los tiempos por famosos historiadores.

José de Viera y Clavijo, al referirse al término de Vallehermoso, dice que "en este distrito se cogen granos, legumbres, seda, hortalizas, vinos, papas, guarapo o miel de palma, lino y lana que tejen las mujeres".

Juan de Castro, autor de una descripción de La Gomera en 1856, escribe que de "las palmas que se crían en abundancia en toda la Isla y sobre todo en Benchijigua se extrae un líquido llamado guarapo por medio de una sangría que se le hace al pie del cogollo (o palmito) curándola todos los días antes del oscurecer. En 24 horas se toma dos veces y es bien seguro que da de 18 a 20 cuartillos castellanos de dicho líquido, el mejor refresco conocido".

En la Historia de las Islas Canarias editada por A. J. Benítez, se habla de que "en la isla de La Gomera, donde, según nuestros historiadores, los indígenas solían extraer de una sola palma cosa de una barrica de miel, y hoy se extrae del macho de este árbol el licor llamado gurapo. Esta bebida cuando está fresca semeja agua de limón turbia y tiene un gusto agradable. Fermentada es laxante, y concentrada por la ebullición produce un jarabe conocido por miel de palma, que cristalizado lo emplean en la confección de dulces".