Las aulas prefabricadas proliferaron en Canarias al calor del crecimiento de la población hasta pasar a formar parte del paisaje educativo de las Islas, pero ahora parecen condenadas a desaparecer o al menos a ser reducidos a su mínima expresión. La Consejería de Educación del Gobierno regional ha declarado la guerra a estas instalaciones, que a comienzos de este año sumaban 111 frente a las 137 del año 2010.

El proceso de sustitución de las llamadas aulas modulares -o, más coloquialmente, barracones- continúa: la Administración educativa ha destinado una inversión de algo más de tres millones de euros a crear nuevas aulas y eliminar prefabricadas en cinco de las siete islas -solo quedan fuera La Gomera y El Hierro- y en 21 centros escolares. Las obras financiadas con esta cantidad supondrán la creación de 53 nuevas aulas.

Con esta actuación, la Dirección General de Centros e Infraestructura Educativa persigue reducir el gasto en alquileres de estas instalaciones, que ha pasado de 3,6 millones de euros a 1,9 en los últimos años, según explica a este periódico el titular del departamento, Demetrio Suárez. El ahorro no procede solo de la supresión de módulos, sino también de las rebajas que la Consejería ha introducido en los contratos.

Las obras -algunas ejecutadas, otras actualmente en ejecución y algunas más previstas para las próximas fechas- se centran en dos colegios de Infantil y Primaria de Tenerife -Buzanada y Parque La Reina, en Arona-, uno de La Palma -el CEIP La Laguna, en Los Llanos de Aridane-, dos de Gran Canaria -Veinte de Enero, en Agüimes; y Eduardo Rivero, en Arucas-, tres de Fuerteventura -Francisca Pérez, en Antigua; Bernabé Figueroa, en La Oliva; y Tarajalejo, en Tuineje- y cuatro de Lanzarote -Costa Teguise, en Teguise; La Garita, en Haría; Alcalde Rafael Cedrés, en Tías; y María Auxiliadora, en San Bartolomé.

También se desarrollan trabajos en tres institutos de secundaria de Tenerife -Adeje, Güímar, Santa Úrsula y San Nicolás (El Sauzal)- y en el IES La Oliva de Fuerteventura. Los centros de educación obligatoria Andrés Orozco (Arafo) y Guajara (Fasnia) y el centro de educación especial Siete Palmas, de la capital grancanaria, son asimismo objeto de obras.

las claves

  • El ahorro en alquiler de aulas modulares no solo obedece a la supresión de estas instalaciones, sino también a las rebajas introducidas en los contratos.
  • Pese a ello, la Consejería sacó a concurso en 2013 la renovación de 78 módulos que mantenía en alquiler, pero la convocatoria quedó desierta.

Un 70% de los IES ha necesitado mejoras

La inversión en obras de mejora en los centros educativos, construcción de nuevos centros y eliminación de aulas modulares ha alcanzado los 11,2 millones de euros en 2014, según los datos de la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias.

Una parte de esta cantidad se ha destinado al programa Reforma, Ampliación y Mejora (RAM), que este curso han sumado 278 actuaciones y que se han centrado especialmente en los institutos de Enseñanza Secundaria (IES). De hecho, un 70% de estos centros ha sido objeto de trabajos de acondicionamiento en este año -y el 30% restante lo fue en 2013, apunta el director general de Infraestructura Educativa, Demetrio Suárez-, lo que da una idea de lo envejecidos que se encuentran estos centros en el Archipiélago.

Las obras RAM han sido ejecutadas en 148 IES, 86 centros de Infantil y Primaria (CEIP) y 44 centros de régimen especial (CEEE). Estas actuaciones son sufragadas por el Ejecutivo autonómico, salvo en el caso de los CEIP, en los que la competencia corresponde a los ayuntamientos. Sin embargo, la Consejería también suele colaborar en su financiación -o incluso asumirla en solitario-, sobre todo cuando se trata de municipios de pequeño tamaño y escasos recursos.

En cuanto a los daños originados por los temporales, el Gobierno gastó alrededor de 150.000 euros en repararlos durante el curso pasado.