El Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza de Canarias (STEC) ha exigido hoy fijar "urgentemente" un calendario de aplicación de la nueva Ley de Educación del archipiélago, que considera que podría suponer "una mejora sustancial" en el sistema de enseñanza se hacerse realidad.

El STEC defiende que, si bien esa Ley Canaria de Educación, recientemente aprobada, plantea dos aspectos criticables, uno que "no apuesta por una única red pública" de enseñanza y otro que se presenta con un "insuficiente incremento de inversión", su puesta en práctica podría beneficiar la labor docente y constituirla como "un muro de contención frente a la Lomce".

Así lo ha declarado el representante del Secretariado Nacional del STEC Fernando Pellicer en una rueda de prensa convocada por su organización para evaluar el comienzo del presente curso escolar en Canarias, del que ha criticado que se haya iniciado con "continuidad en los recortes de los cursos pasados", acusando de esa situación al Gobierno central, sobre todo, pero también al autonómico.

Puesto que es el Gobierno canario el que decide, en última instancia, lo que se hace en el sistema de enseñanza de las islas, considera ese sindicato, que, en todo caso, cree preciso "señalar como máximos responsables del deterioro del sistema público de la educación al Gobierno estatal del PP, así como al PP de Canarias".

Y es que son los populares quienes, tanto en el ámbito regional como en el de todo el país, "defienden y aplican las mismas políticas privatizadoras de la educación y segregadoras del alumnado", ha sostenido Pellicer.

Este portavoz del STEC ha subrayado que en las islas, "el Gobierno de CC y del PSOE practica una política de amortiguar el impacto de la agresión del Gobierno estatal del PP, pero no de oposición y rechazo contundente", en la medida en que sus responsables "no se plantan ni trazan políticas alternativas".

Con lo que "tanto el alumnado como el profesorado en Canarias pagan las consecuencias", concluye el sindicalista.

Pellicer insiste en el rechazo de su organización a la Lomce, la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa promovida por el PP desde el Gobierno central, que el STEC pide que sea derogada, al tiempo que reclama al Gobierno de Canarias y a su Consejería de Educación que tomen medidas para que no se aplique en las islas.

El STEC demanda al Gobierno canario que se subsanen los efectos de "algunos recortes que se practicaron en los últimos cursos" y que "no han sido recuperados" como los referentes al número de profesores disponibles en la enseñanza pública, puesto que "desde el año 2008 hay 2.500 docentes menos".

Su portavoz cuestiona, además, el aumento de las horas de permanencia establecidas para los profesores en la Educación Secundaria, que es "una imposición del Gobierno de Canarias y la Consejería de Educación" y "no responde a normas estatales".

Y critica, así mismo, lo que califica como "tibieza", "incoherencias" y "doble lenguaje de los que gobiernan Canarias" cuando se posicionan en rechazo a la Lomce, ya que eso contradice luego su praxis en asuntos como la puesta en marcha de la nueva Formación Profesional Básica diseñada en el marco de la ley estatal.

"A pesar de las críticas realizadas por el Gobierno de Canarias y los responsables educativos a la Formación Profesional Básica, han sido pioneros en su aplicación", sentencia Pellicer.

Agrega que, por ello, el STEC "considera que hay razones más que suficientes para convocar movilizaciones inmediatas" en el sector educativo, tanto en el ámbito español como en el canario, y que, en consecuencia, "no descarta ningún tipo de medida de presión" a adoptar en próximas semanas.

Aunque matiza que su organización "rechaza a priori las convocatorias de huelga u otras movilizaciones realizadas -a su entender- desde las estructuras centrales de determinados sindicatos a espaldas del profesorado", por lo que asegura que antes de convocar protestas lo consultará al personal docente.