Pasó años pinchando discos en los 40 Principales, cantando goles del Tenerife y haciendo preguntas a políticos, famosos y demás en Radio Club Tenerife, aparte de presentar infinidad de eventos. Por eso chirría tanto que, desde hace 6 años, justo desde que dirige la Televisión Canaria, Willy García casi no le haya dado opciones a los periodistas para ser él el entrevistado y responder sobre su polémica gestión del ente. Él admite ese distanciamiento, pero subraya que solo ha querido "trabajar y lograr resultados". Lo que sigue, por tanto, tiene mayor valor por tratarse de las pocas entrevistas que ha concedido. Quizás pronto le toque aceptar muchas más, ya que, si bien no tiene claro su futuro, ni siquiera descarta dedicarse a la política, "a la que siempre he defendido". Desde luego, al que más defiende en estas líneas es a Paulino Rivero, lo que no sorprenderá a muchos.

¿Se levanta y se va si le llamo Willy y no Guillermo?

Ese cambio no lo entendí ni yo.

Se dijo que fue decisión suya...

No lo sé. No sé si tiene que ver con una tendencia natural cuando se logra un aparente crecimiento profesional. Pero, de hecho, a mí me llaman por la calle Guillermo y no me doy la vuelta. Siempre he sido y seré Willy García, que es como me llamaban en el colegio.

Hasta se dijo que lo impuso...

Solo fue para hacerme daño...

¿Y por qué nunca lo aclaró?

La gente sabe cómo soy. Que me llamen don Guillermo jamás hará que deje de ser Willy...

Se dijo hasta que era por complejo de inferioridad, de formación...

(Risas) Para nada. Nunca tuvo nada que ver conmigo.

¿Y quién es Willy o Guillermo García?

Una persona absolutamente normal, muy trabajadora, muy implicada en lo que hace, muy profesional, perfeccionista y con gran vocación de servicio público. Mi empeño sigue siendo informar a los canarios de la mejor manera posible con un medio creíble y honesto...

¿Cree que su TV es creíble?

Sí, absolutamente; de lo contrario, no se explicarían las altísimas audiencias de los servicios informativos, su espina dorsal. Se debe a un trabajo serio y riguroso...

¿Y eso no ha sido por el debilitamiento de TVE en Canarias?

No, hay más competencia que nunca, pero tenemos lo que otros no: que lo hacemos aquí...

¿Echa de menos el "córner para el Tenerife"...?

Esa es una etapa que está ahí y no sé si volverá. Ahora me dedico a lo público, pero sigo perteneciendo, en excedencia, a la cadena de radio más importante de España...

¿Su horizonte es volver a la SER...?

No me pongo horizontes y ni descarto volver a narrar partidos. Solo quiero cumplir mi etapa en la Canaria hasta 2015 y hacer bien mi trabajo...

¿Lo está haciendo bien?

Estoy muy satisfecho. Siempre se puede mejorar, nadie es perfecto y no todo sale como uno quiere, pero estoy contento con los objetivos alcanzados, que eran impensables hace años.

¿Lo vincula solo a las audiencias?

No. Las audiencias son el resultado. Hablo de las respuestas informativas inmediatas ante ciertos acontecimientos, que antes no se habían visto y que ya forman parte del manual de estilo. La cadena se ha hecho muy cercana a la sociedad canaria, tal y como reflejan los muchos convenios al año con entidades e iniciativas. Hacemos una gran labor social...

¿Cree, de verdad, que el canario la siente propia?

Sí, aunque es difícil, ya que todos los medios públicos están sometidos a la crítica al poder.

¿Quién le ha ayudado más en su carrera?

(Largo silencio) Muchas personas.

¿Dos, tres...?

Prefiero no personalizar. Sí creo que la clave de mi éxito, por decirlo así, se basa en rodearme de gente mejor que yo: soy un director de orquesta.

¿No destaca a nadie?

Está claro que Paco Padrón fue un antes y un después para mí. Y, evidentemente, en esta etapa ha sido clave Paulino Rivero...

¡Jo!, se me ha adelantado... Muchos piensan que ha sido su gran mentor...

Pero Willy García ya existía antes. En la radio estuve 22 años. Me da una gran oportunidad que me proyecta, pero no es cuestión solo de que te pongan; hay que hacer bien el trabajo...

Ya, pero también puede empecinarse él. Como alcalde sauzalero, Rivero portaba una agenda con una gran pegatina de la SER: ¿su vínculo con usted no ha sido excesivo?

Está claro que es un cargo de confianza. Sí le puedo decir que Paulino, al que conozco muy bien, no se basa en amistades para hacer equipos: su decisión fue solo profesional.

¿Se ha sentido perseguido?

Pero no es algo personal, le pasa a todos los directores de teles públicas...

Usted ha sido el más criticado entre los de la Canaria...

Pero no creo que sea por mí, sino por el cargo, y así lo comentamos en la Forta cada mes.

¿Y por qué su hermetismo?

Es que me explico todos los días, pues la tele se ve y la radio se escucha. Esa es mi respuesta. No le veo sentido a salir a todo lo que se dice... Además, mi cargo me obliga a ser muy prudente, ya que cualquier interpretación puede poner en peligro el proyecto.

Bueno, pero son años de supuestas irregularidades...

La respuesta a la auditoría de la Audiencia, cuyo texto se elevó a categoría de verdad absoluta en infinitas horas de radio, televisiones y prensa, se la dio su órgano superior, el Tribunal de Cuentas, que dice que no hay ninguna irregularidad. Eso sí, esto apenas sale.

Ergo, se siente perseguido...

No, creo que son otros los que deberían hacer una reflexión y explicar ese tratamiento. Yo siempre lo tuve claro; no tengo que defender mi inocencia.

¿Sí ha sentido envidia en otros?

Eso sí: hay mucha gente que anhela un cargo así.

¿Mediocridad, frustraciones...?

Sí. Hay mucha gente pendiente de la vida de los demás, algo que no entiendo. De todas formas, supongo que esto ocurre por hacer las cosas bien, por tomar riesgos y ser atrevidos.

Pero, ¿tiene la conciencia tranquila?

Seguro que hay cosas que se pudieron hacer de otra forma...

¿Cómo cuáles? ¿Todos los contratos pasaron por sus manos...?

Tenemos gestores extraordinarios y el nivel de control de los contratos ha sido total. Lo más curioso es que he sido el director que menos ha contratado, entre otras cosas porque se ha reducido el presupuesto a la mitad. El margen de equivocación, por tanto, es mínimo.

¿No cambiaría nada?

No creo que eso hubiera evitado las críticas. El trabajo está estructurado y las decisiones son colegiadas y objetivas, pues siguen trabajando las mismas empresas desde hace 15 años.

Pues será por eso, ya que la sensación es que se ha ahogado la producción local con tratos de favor a amigos y gente de CC...

Pero la producción audiovisual no la ha ahogado la Autonómica. Lo ha hecho la crisis. Es más, hemos intentado salvar ese patrimonio. Sin embargo, hemos pasado de 68 a 38 millones de presupuesto y, no obstante, hemos logrado seguir siendo competitivos...

¿No se arrepiente de nada?

No. Lo único que he hecho es tomar decisiones y trabajar.

¿Nunca pensó en dimitir?

Para nada. Sí puedo decir que soy muy honesto y profesional...

Siempre le han censurado una supuesta escasa formación...

Tengo 45 años y llevo casi 30 haciendo periodismo: ese es mi nivel de formación, aunque parece que, para algunos, no es suficiente.

¿Jamás ha tenido complejos?

No, aparte de que nunca seré yo el que le robe a alguien sin carrera el derecho a prosperar...

Dígame, al menos, el peor programa que ha permitido...

Quiero matizar que sé que no lo he hecho todo bien. Lo peor es haber tomado decisiones sobre el personal...

Se le acusó de despedir por venganza a los que hicieron huelga...

Pero no fue así. La reducción de la plantilla la ejecuta la concesionaria...

Ya, pero una llamada, un comentario...

No me dedico a eso. Estuve al margen. Es más, ni le pongo cara a los que se movilizaron. Para mí eran todos igual de válidos, pero había que reducir.

Se sintieron represaliados...

Cuando uno se queda sin trabajo, entiendo que se diga eso y otras cosas...

Insisto: ¿lo peor que ha emitido?

No hay un programa que no me guste. Llegan a todos los públicos y tienen gran nivel.

¿Con qué se queda más?

Somos muy potentes en los informativos, tenemos un gran equipo en deportes y un programa de humor (En Clave de Ja) que es un referente...

Pues a mí, y a mucha gente que conozco, no me gusta nada...

Vale, pero es el más visto....

¿No hay un claro déficit cultural y sí mucho populismo?

Pero tenemos programas culturales, aunque, claro, perdimos el Segundo Canal.

¿En la calle nunca le critican la parrilla?

No, y menos "En Clave de Ja", cuyos personajes son muy queridos...

¿Me equivoco si deduzco que siempre ha votado a CC?

Me lo reservo, pero me considero muy canario y siempre he votado al partido que creo que mejor defiende los intereses de las Islas...

¿Se siente de derechas, de izquierdas...?

Ideológicamente, me ubico en Canarias...

Pero, por ejemplo, ¿apoya que se investigue con células madre o la ley del aborto...?

No soy tanto de ideologías. Creo más en las personas, aunque claro que defiendo lo de las células y creo que se debe cambiar la ley del aborto, pues no ayuda a la libertad de la mujer.

¿Quién ha sido el mejor presidente regional?

Todos han hecho un buen trabajo, y de ahí el salto que ha dado Canarias. Eso sí, la labor que más conozco es la de Rivero, al que creo un gran presidente y un líder. Es honrado y trabajador, valiente, de firmes convicciones y defiende a su tierra por encima de todo.

¿Ve bien las prospecciones? ¿Entiende las críticas del PP a eso de la "telepaulino"?

Entiendo que la labor del PP sea esa: hacer ver a los ciudadanos lo que no es. El problema es que haya gente que se lo crea. De todos modos, tengo grandes relaciones con gente del PP y, hace poco, un alto cargo me dijo que en TVE-C debía haber un Willy García. Lo que sí me preocupa como canario es que nuestras islas tengan un riesgo para el turismo por un hipotético derrame. Eso sí, en la TV y la radio salen todas las voces y tampoco les podemos dar la espalda a miles de canarios que se han manifestado abrumadoramente en contra.

¿Mejor presidente nacional?

Todos han hecho cosas buenas y malas: lo dirá la historia.

¿Dónde se ve en 10, 20 años?

No sé. Siempre he trabajado para el público y me gusta mucho hacerlo para los demás. Hasta ahora, lo he hecho en los medios y me gustaría seguir ayudando a los demás. Está claro que, con la nueva ley, será muy difícil seguir en el cargo tras las elecciones.

¿Hacia dónde ha de ir el periodismo?

Ha habido muchos cambios, sobre todo por internet, pero necesita una cura de humildad...

¿Y si le dicen que usted es el primero que la necesita?

Lo tendría en cuenta.

¿Es vanidoso?

No, al revés, humilde. Sé lo que quiero y lo que no...

¿Y qué no quiere?

Hacerle a los demás lo que no deseo para mí.

¿Ha visto sobres?

No, pero sé que han existido y existen. Hay gente que no tiene buena pinta.

¿Insinuaciones feas?

Jamás me las han hecho porque la gente sabe que, en eso, no hay nada que hacer conmigo.

¿Su cargo le ha hecho ver la política de otra forma?

Sí. La política es un mundo muy complejo. Es muy fácil criticarla...

¿Entraría en ella?

La política es una forma de trabajar por los demás. Eso me gusta. Por eso la defiendo y también a los políticos, ya que supone defender la democracia y hay mucha gente honrada ahí. La verdad es que, aunque no me lo he planteado, no descarto entrar.

Mucha gente dirá que no ha parado de hacerla...

Ya, y seguramente es un poco así.

"Lo más duro ha sido el cambio hacia mí de cierta gente en la calle"

García asegura que su mayor acierto en la vida ha sido dedicarse al periodismo. De hecho, no se imagina su vida haciendo otra cosa y recuerda que todo surgió con una visita de su colegio a Radio Club, siendo un niño. De hecho, uno de sus mejores momentos fue cuando, con 17 años, llegó un telegrama a su casa que decía que le habían aceptado como pinchadiscos de los 40. "Aún lo guardo". Eso sí, afirma que lo mejor de su vida "está por venir". En cambio, preguntado por el mayor error, duda mucho y acaba indicando que nunca esperó "la contestación mediática que hubo a mi nombramiento. Jamás pensé que compañeros de profesión dijeran algunas cosas. Yo venía de un medio líder, donde tenía un gran protagonismo personal y era una persona muy querida y respetada por todos. Era alguien con el que resultaba difícil meterse porque estaba mal visto: era un líder en esa radio. Mi impresión es que, desde que me fui a lo público, algunos se creyeron con licencia para ir a por mí. A unos ya los conocía, otros se quitaron la careta, y en sus conciencias dejo lo que han intentado hacer, aunque no soy nada vengativo ni tampoco nadie para perdonar. Eso sí, recuerdo que algunos me daban solo unos meses en la tele. Lo que sí me dolió, lo más duro, ha sido el cambio hacia mí de cierta gente en la calle". Aunque dice que no suele volver a escucharse, uno de los goles que más recuerda, si bien estaba haciendo el inalámbrico, fue el gol de Eduardo en La Coruña en la promoción para no descender en 1990 (el Tenerife se salvó al ganar 0-1, tras el O-0 del Heliodoro). También el de Hugo Morales (que sí narró) en Leganés para el ascenso a Primera de 2001, el de Mata contra el Brondby para pasar a semifinales de la UEFA del 97 o el de Pier al Madrid en el final de la Liga de la 91-92 (nunca ha escondido su barcelonismo). Pinchando música, resalta que apoyó mucho a los grupos canarios, como La Pista Búlgara, mientras que, de los eventos presentados, se queda con el primer +Dance, con 50.000 personas, pese al palo de agua, y la gala de la reina del Carnaval con Bertín Osborne (la de 1999), "pues mucha gente me agradeció en la calle que la salvara improvisando. Se me pone la carne de gallina aún al recordarlo. Yo he sido muy querido y, por eso, para mí no ha sido fácil cómo, de la noche a la mañana y por un nombramiento, mucha gente ha cambiado hacia mí".