Que la obesidad en Canarias alcance unos niveles no comparables con ningún otro territorio europeo no es ninguna novedad desde hace algunos años, sin embargo, sí lo es que a los expertos les preocupe cada vez más el ascenso que se sigue registrando entre los niños con edades comprendidas entre los dos y los nueve años, tal y como ha quedado reflejado en la Encuesta de Salud de Canarias de 2009.

Según los últimos datos oficiales, el 19,8% de los niños de entre dos y cuatro años es obeso, lo que supone que uno de cada cinco niños canarios está muy por encima del peso que debería tener. Igualmente, los niños de cinco a nueve años tienen unos índices de obesidad "altísimos", con un 16,4%. A partir, de esa edad las cifras bajan diez puntos porcentuales y se sitúan en el 6,37% entre los 10 y 14 años.

"Desde el año 2005 existen varias campañas oficiales destinadas a atajar este problema y a promocionar los hábitos saludables; sin embargo, no son proporcionales a la población, es decir, no llegan a todos los municipios, ni a todos los centros escolares, y mucho menos a todos los niños", explica el coordinador de proyectos de la Asociación de Obesos de Canarias (Obecan), Isidro Sosa, para el que es necesaria una mayor implicación de las Administraciones "si se quieren conseguir resultados de aquí a 10 años".

Y es que en lo que todos los expertos coinciden es en que erradicar la obesidad es una cuestión que requerirá "mucho tiempo, esfuerzo y apoyo económico".

"Nosotros. con los programas de Obecan, vamos por muchos colegios del Archipiélago enseñando a los niños cómo comer saludablemente y puedo asegurar que no hay un alumno que no sepa de antemano qué alimentos son los más saludables y hay que consumir en mayor grado y cuáles no. Es más, se saben hasta la pirámide nutricional, pero que conozcan la información no significa que la utilicen, así que en el 90% de los casos si tú les das a elegir entre una naranja o un bollicao, elegirán el segundo", admite Sosa.

Sobre las causas que producen este sobrepeso en niños, el responsable de Gastroenterología y Nutrición del Hospital Universitario de Canarias y presidente de la Sociedad Canaria de Pediatría, Honorio Ramos, explica que "se debe a los cambios dietéticos producidos por un nuevo estilo de vida que hace que los pequeños se alimenten con muchos hidratos de carbono y con alimentación industrial tipo potitos y galletas, cuando antes no era así".

No obstante, considera "esperanzador" el notable descenso de casos de obesidad que se registra a partir de los 10 años y lo achaca a las campañas realizadas con este sector poblacional, por lo que ahora aboga por que "este tipo de medidas se amplíen y lleguen también a los más pequeños".