El consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias, Fernando Bañolas, es partidario de introducir más restricciones a la publicidad del tabaco en las Islas -donde este sector cuenta con una mayor libertad de comercio y promoción en virtud de lo dispuesto en el Régimen Económico y Fiscal (REF)- y, de esta manera, atender a la propuesta de la Comisión Nacional para la Prevención del Tabaquismo, que ha pedido que la Comunidad Autónoma incorpore las mayores limitaciones a esta práctica.

Bañolas indicó que primero se deberá producir un debate sobre el asunto, entre Salud Pública, el Gobierno y el Parlamento, con el fin de desarrollar una nueva regulación de la aplicación de la ley, sobre todo en las zonas frecuentadas por menores de edad, para controlar la publicidad del tabaco.

El consejero garantizó que su departamento cumplirá "estrictamente" la ley del tabaco, que entró en vigor el pasado domingo y que prohíbe fumar en lugares públicos cerrados, y confió en que las nuevas medidas contribuyan a que los fumadores abandonen el hábito.

Bañolas, con motivo de una visita que efectuó al Hospital General Doctor Negrín de Gran Canaria, señaló que aún se está un poco "expectante" sobre cómo será la aplicación de esta ley, si bien considera que la población está informada "de sobra".

A partir de ahora, quienes quieran fumar en espacios públicos como los hospitales no podrán hacerlo, ni siquiera en las aceras y zonas urbanizadas del centro, detalló el consejero, que, no obstante, matizó que su departamento solo es competente para vigilar sobre el cumplimiento de esta ley en el interior de los edificios, no en los exteriores.

Los colegios oficiales de profesionales sanitarios de Canarias, respaldados por el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo, han pedido limitar la singularidad que hay en las Islas respecto a la restricción de ventas que fija la Ley Antitabaco, que creen "verdaderamente grave".

En un comunicado emitido ante la entrada en vigor de dicha ley, por la que expresan su satisfacción, el referido comité nacional y los colegios de médicos, dentistas, enfermeros, farmacéuticos y psicólogos de Canarias, "es decir todos los sanitarios", según destacan, critican que en el Archipiélago "se pueda vender tabaco prácticamente en cualquier sitio" por sus singularidades económicas.

Ello se debe a excepciones normativas recogidas en el REF, un instrumento que esos colectivos "lamentan que pueda ocasionar perjuicios a la salud, especialmente en los menores, muy sensibles a las actividades de promoción de la industria tabaquera", con el argumento de aportar beneficios a la economía. Los profesionales sanitarios reclaman a las autoridades del Archipiélago que, "por ser de su competencia, limiten y controlen las actividades de promoción del tabaco" en su territorio, en el que recuerdan que no ocurre lo que en la Península, donde están reservadas a los estancos, a los que no pueden acceder los menores.

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